Proyectar la heredera de la Moto Guzzi más famosa del mundo ha representado afrontar un reto tecnológico y económico, para replicar, como en 1971, la nueva referencia de la categoría. Una moto imponente, exclusiva, capaz de resaltar elementos de nobleza de una marca símbolo del ‘Made in Italy’.
Partiendo de la intuición estilística de un diseño innovador pero reconocible y coherente con la genealogía de las siete generaciones de California producidas hasta hoy, han sido reproyectadas, con la más avanzada tecnología del primer grupo motociclista europeo, los principales puntos distintivos de MotoGuzzi, obteniendo una serie de resultados como:
• El V Twin de mayor cilindrada jamás producido en Europa, capaz de ofrecer un impresionante par motor de 120 Nm a sólo 2750 rpm.
• La primera custom del mundo dotada de control de tracción MGCT y de tecnología Ride by Wire multimapa, con la posibilidad de seleccionar tres curvas de potencia diferentes: Turismo, Veloz y Lluvia.
• Primera custom del mundo equipada con grupo óptico delantero dotado de iluminación diurna LED DRL, como se usan en los coches de última generación.
• Chasis inédito de doble cuna, dotado de un sistema de soporte elástico del propulsor capaz de eliminar completamente la transferencia de vibraciones.
• Nueva transmisión final con cardán, al vértice de la categoría por fluidez y baja rumorosidad de funcionamiento.
Observando cualquier detalle de la nueva California 1400 Touring o Custom, de la rueda a la instrumentación, de los componentes a la calidad de la pintura y del ensamblado se intuye la entidad de los cambios: esta Moto Guzzi representa seguramente un punto de inflexión en la historia de la marca.
Es la California en su expresión más clásica, destinada a los grandes viajeros, a los devoradores de kilómetros y cuantos tienen una dependencia total de la moto hasta el punto de no echar de menos al coche. En cuanto al confort, protección aerodinámica y capacidad de carga, la versión Touring puede rivalizar incluso con vehículos de cuatro ruedas en el sentido de libertad y placer de conducción que sólo una moto o, mejor todavía, sólo una Moto Guzzi, puede ofrecer. Muy bien equipada, dotada de un asiento bicolor, parabrisas tipo “Patrol”, faros suplementarios cromados, maletas laterales de 35 litros o kit de protección de motor y maletas, la Touring es una versión “cromadísima” y tecnológicamente “tourer” que, además del impresionante bicilíndrico nunca antes fabricado en Europa, se encuentra en disposición de rodar durante todo el día con un sonido vibrante y potente capaz de dejar atrás a casi cualquier vehículo de dos y cuatro ruedas.
Tras el particular motor, la ciclística y sus dispositivos tecnológicamente avanzados, vistos ahora por primera vez en su categoría, también se encuentra la posibilidad de elegir la respuesta preferida del motor con la selección del mapa electrónico de Turismo, Sport o Lluvia, o quizás sólo seleccionar el Control de Crucero, que junto al antirrobo, forman parte de la dotación de serie de este vehículo.
El ya de por sí suntuoso equipamiento de serie de la California Touring no acaba ahí, pues existe la posibilidad de modificar posteriormente la apariencia estética de la moto, según los gustos de su exigente propietario en función del completo catálogo de accesorios jamás producido por Moto Guzzi.
Silenciadores de alto rendimiento, componentes cromados, todo tipo de mecanizados, asientos de diverso material y color, o el soporte App, que permite transformar el iPhone en un tablero de instrumentos complementario para conseguir la más amplia y variada información de prestaciones y datos técnicos.
Particularmente cuidado es el “concepto cromático”, desarrollado sobre dos evocadoras gráficas, la Eldorado, blanca con fileteado sobre el depósito, inspirado en la antigua versión “California Highway Patrol”, o la “Ambassador”, que emplea el clásico negro con fileteado en blanco, similar a la versión original, tipo V7 y 850 California.
La Moto Guzzi California no es en absoluto la gemela deportiva de su hermana Touring, es la hermana mala, su antítesis por temperamento, estilo y vocación.
No atrae al piloto con accesorios o prestaciones desbordantes, sino que lo conquista con la fuerza expresa de su diseño “cruiser”, dura y pura, dos ruedas, un motor, un asiento y un manillar. Nada a consignar pero todo realizado con rigor en sus formas y funciones, combinando un sentido estético típicamente italiano, expresión de un cuidado extremo en los detalles y una capacidad de ejecución que es la máxima interpretación del “Made in Italy” que se haya producido en el campo de la automoción.
Basta fijarse en los detalles del doble asiento, donde se puede observar el logo estampado del Águila, o el manillar tipo “drag bar” con soportes aligerados, o los inéditos amortiguadores posteriores dotados de depósito separado. Contribuye a incrementar la potencia expresiva del diseño unas gráficas minimalistas basadas en colores como el gris mercurio o el negro basalto que le dan un incuestionable toque de estilo, como las ruedas negras con el logo de Moto Guzzi lacado en rojo o los espejos retrovisores en negro.
Una vez sentados, emergen rápidamente las diferencias respecto a la Touring; el nuevo asiento deportivo o el manillar tipo “drag bar” confieren una posición sobre la moto bajar y próxima a la rueda posterior, para una perfecta exhibición en áreas metropolitanas.
Una vez en marcha se siente el sonido del gran bicilíndrico de 1.380 c.c., que descarga con rapidez sobre el asfalto su par de 120 Nm a 2.750 rpm y se siente el overdrive, o a bajo régimen, cerca del mínimo se puede escuchar la batida de los pistones de 104 mm. del majestuoso V a 90 grados realizado en Mandello del Lario que se filtra por la innovadora fijación del motor al chasis tubular.
El voluntario aspecto minimalista de su diseño resalta el contenido tecnológico con respecto a cualquier otra moto producida por la competencia. La California Custom, al igual que su compañero de viaje, esta equipada de serie con Control de Crucero, con el Control de Tracción MGCT, regulable en tres niveles y gracias a la presencia del “Ride by Wire” es posible incluso regular la respuesta del motor dependiendo de la modalidad seleccionada, “Turismo, Sport o Lluvia”.
Y si el "piloto" de la California Custom puede elegir casi en todo momento el carácter de su moto según el tipo de ruta, lo mismo puede hacer con la personalidad de su vehículo gracias al mayor catálogo de accesorios producido por Moto Guzzi.