El Gran Premio de Aragón, décimo cuarta cita de la temporada 2018, deparó tres emocionantes carreras en el circuito de Motorland Aragón.
Jorge Martín se impuso de forma incontestable ante Marco Bezzecchi y Enea Bastianini en Moto3. Binder venció con brillantez frente a Pecco Bagnaia y Lorenzo Baldassarri en Moto2. Finalmente, en MotoGP la victoria fue para Marc Márquez frente a Andrea Dovizioso y Andrea Iannone.
Durante el fin de semana os hemos ido trayendo lo sucedido en forma de crónicas, aderezado con las declaraciones más relevantes y las noticias más importantes. Hoy toca ir más allá y pasar al análisis global, en forma de píldoras. Son diez pequeñas dosis, con la velocidad como principio activo, la gasolina como excipiente y sin efectos secundarios descritos. Posología al gusto, aunque se recomienda tomar todas de golpe.
PÍLDORAS MOTO3
El mantra 88
Originalmente, la palabra ‘mantra’ hace referencia a palabras o frases sagradas de algunas religiones, normalmente orientadas a la meditación. Cual religión, el motociclismo también posee sus propios mantras: frases que se consideran sagradas. Una de ellas es que las carreras no se ganan en la salida y/o en la primera vuelta. Sin embargo, en Aragón pudimos asistir a la creación del ‘mantra 88’ a cargo de Jorge Martín. Desafiando a toda lógica, el madrileño ganó la carrera en la salida y en la primera vuelta. Una arrancada perfecta y un giro mejor para irse en solitario y evitar la pelea grupal, donde se le hubiera complicado mucho la victoria.
Aerolíneas MB12
Se le hubiera complicado mucho porque hubiese tenido que verse con las ‘Aerolíneas MB12’, donde la KTM de su gran rival, el italiano Marco Bezzecchi, le hubiese sometido sin piedad en la infinita recta aragonesa. Si bien Honda y KTM están demostrando un gran nivel en el global del paquete, cuando se trata de velocidad pura es la marca austriaca la que ofrece un punto más, especialmente en la máquina del italiano, lo cual es mérito del PruestelGP, por supuesto. Con Martín escapado, Bezzecchi supo hacer valer esa superioridad perfectamente para minimizar las pérdidas y seguir al acecho en la clasificación general.
Cajón reservado
Con los dos contendientes al título ocupando las dos primeras posiciones del cajón, faltaba por otorgar la tercera. Había varios contendientes, entre los que se echaba de menos a un tocado Arón Canet que tuvo que retirarse por el dolor tras recibir un nuevo golpe en carrera. En la última vuelta pasó a ser cosa de tres, y finalmente fue Enea Bastianini el que se llevó el gato al agua para ocupar el mismo escalón del podio aragonés que los dos años anteriores. Un cajón que parece tener reservado y al que accedió tras contener a Fabio Di Giannantonio y Marcos Ramírez.
PÍLDORAS MOTO2
La cara B de la victoria
Hay carreras que parecen tener dos ganadores. Por más que en lo alto del podio sólo se puede subir uno, otro piloto se va con la sensación de haber ganado. Eso es lo que pasó en Motorland en la categoría intermedia, donde Brad Binder se hizo con una gran victoria después de haber partido desde la pole y haber tenido que luchar en un grupo de cuatro. Tras él entraría Pecco Bagnaia, que tuvo un toque con el sudafricano que le pudo llevar al suelo, para finalmente reponerse, entrar segundo y ampliar su ventaja en la general más de lo que lo había hecho en sus dos triunfos anteriores juntos.
Duelo de urgencias
Unas últimas vueltas realmente emocionantes permitieron escaparse ligeramente a Binder primero, y a Bagnaia después. En gran parte porque los otros participantes en la lucha eran los que más necesitaban el podio. Lorenzo Baldassarri y Álex Márquez se engancharon en un duelo de urgencias que deparó una bonita lucha, que les impidió luchar por más pero que fue un regalo para la vista. Finalmente el italiano consiguió completar el triplete de ‘Bes’ en el podio –al que volvía siete carreras después-, con el español sumando puntos después de tres ceros.
La grieta del cántaro
Muy distinta fue la carrera de Miguel Oliveira. El portugués volvió a fallar en clasificación y se encontró en la 18ª posición de parrilla. Empieza a ser tan habitual encontrarle por ahí como verle remontar en carrera, normalmente a través de una salida increíble. El problema es que Aragón, con la primera curva tan cerca y tan caótica, no permite exhibiciones en la arrancada. Después volvió a demostrar que tenía ritmo para estar delante, pero los segundos perdidos en las primeras vueltas le hicieron acabar séptimo (su peor resultado del año) tras Marcel Schrotter y Joan Mir. Tanto ir el cántaro a la fuente… de momento no se ha roto, pero en Motorland apareció la primera grieta.
PÍLDORAS MOTOGP
Limpieza en lo sucio
Con Andrea Iannone colándose en el momento álgido, el gran atractivo de la carrera fue el mano a mano ofrecido por Marc Márquez y Andrea Dovizioso. Fue la demostración de que se puede batallar al máximo, realizar adelantamientos al límite e incluso salirse al compás a la zona sucia de la pista sin que ello afecte en absoluto a la limpieza de la contienda. Cero toques y máximo espectáculo, la recta perfecta de un duelo por la victoria en la máxima categoría que se resolvió en favor del español, que en el estreno de su flamante curva puso lo que le faltaba a su Honda para doblegar al italiano, que por fin encontró el ritmo con Ducati en Aragón.
Baile concedido
El marcaje entre Márquez y Dovizioso permitió un ritmo asequible para las Suzuki en la primera mitad de carrera, y el duelo posterior hizo que las motos de Hamamatsu se apuntaran al baile, especialmente Andrea Iannone. La caída de Jorge Lorenzo había abierto un hueco en el podio, que sería para el italiano en detrimento de Álex Rins. Las circunstancias les concedieron un baile que culminó con un podio que supone el fin de las concesiones de la marca, al sumar ya los seis ‘puntos de podio’ que les harán subir a la primera división de MotoGP junto a Honda, Ducati y Yamaha; sólo un año después de su ‘descenso’ a segunda.
Alegrías necesarias
Fuera del plano televisivo que agrupaba al cuarteto de cabeza, dos pilotos se llevaban una alegría necesaria. El primero, Dani Pedrosa. No tanto por la quinta posición, sino por la sensación de haber reencontrado las sensaciones perdidas con su moto, que le hacen pensar que podrá volver al podio antes de despedirse en Valencia. El otro, Aleix Espargaró, se encontraba un oasis en el desierto de Aprilia en este 2018. La sexta posición sabe a gloria tras un año en el que la RS-GP no le ha dado más que disgustos, lo que a buen seguro le ayuda a recuperar la motivación para un 2019 en el que la marca de Noale necesita dar un paso adelante.
El fondo del pozo
Se juntó todo en Yamaha. Era el día en el que se iba a certificar la peor sequía de su historia, y se certificó de la peor forma posible. Peor resultado del año: el octavo de Valentino Rossi, y gracias. Gracias a que cayeron Jorge Lorenzo, Cal Crutchlow y Álvaro Bautista, que por ritmo y sensaciones estaban destinados a acabar delante. Es decir, sin caídas, seguramente Yamaha se hubiera quedado fuera del top ten. Y todo en el Gran Premio con el que comparte patrocinador. Ver a Ducat, Honda y Suzuki peleando con el logo de Movistar de fondo es el perfecto resumen del drama de Yamaha, que no pudo competir ni con Aprilia.
PÍLDORA EXTRA
Aragón y el reino de España
Desde que Motorland Aragón entró al calendario de forma atropellada en 2010 para sustituir al inexistente Balatonring, los pilotos españoles han conseguido 19 de las 27 victorias. Si empezamos a contar desde ese mismo 2010, es el trazado con más triunfos españoles, uno más que en Sachsenring y tres más que en cualquier otro.
Si en los últimos años España ha dominado claramente el Mundial, su reinado encuentra su punto álgido en la corona de Aragón, donde se promedian más de dos victorias al año. En este 2018, los triunfos de Martín y Márquez han servido para igualar los 16 triunfos que lleva Italia en este 2018, donde los transalpinos amenazan con cortar la racha española, que lleva desde 2009 siendo el país con más victorias todos los años. En Aragón, los italianos ocuparon el segundo y tercer escalón del cajón en las tres carreras, pero no ganaron. La gira y Valencia decidirán.