La KTM 950 Adventure fue la primera gran moto de la firma austríaca, el gran salto que la permitió comenzar a pensar en el mercado global de la moto, y no sólo en la de off road, sino también en la de carretera. Tres lustros después de su nacimiento, la oferta KTM Adventure se ha multiplicado hasta tener modelos de tres cilindradas y con diferentes orientaciones. Esta KTM 1090 Adventure, es la heredera de la KTM 1050 Adventure que se comercializaba hasta ahora, pero profundamente revisada para adaptarse a la homologación Euro4, y con un motor claramente más divertido. La anterior disponía de una potencia de 96 kW, y ahora esta KTM 1090 Adventure ve como su motor se potencia hasta los 125 CV. De todos modos hay también una versión destinada al carnet A2 con 35 kW, que puede llegar a los 96 CV anteriores tras los dos años reglamentarios.
La treintena de caballos ganada marca en gran parte la diferencia de esta nueva KTM 1090 Adventure, que tiene mucho más brío y prestaciones, pero no es la única que plantea. La imagen es la misma que la de su predecesora, ahora con nuevos soportes elásticos de serie para las maletas suministradas por KTM Power Parts.
También cuenta con una estructura similar a la del resto de la gama KTM Adventure y un listado de componentes común, como las suspensiones WP, los frenos Brembo, y una electrónica bastante sofisticada, que incluye tres modos de potencia, control de tracción, embrague con asistencia tanto en reducciones como en aceleraciones, y una ergonomía ajustable. La KTM 1090 Adventure no tiene en su paquete electrónico de serie modo off road, pero puede instalarse como opción tanto en la gestión del motor, como en el funcionamiento del ABS. Otros detalles son su cuadro de instrumentos multifunción y ajustable, las luces LED de día o el manillar de aluminio.
Pero lo que distingue a la KTM 1090 Adventure de sus hermanas es el haber sido creada con la intención de convertirse en el modelo más fácil en todos los sentidos de la gama. Las versiones “R" están más enfocadas al uso off road, la “S" al funcionamiento deportivo, y la “T" al turismo, pero este modelo se convierte en un comodín que se puede adaptar a todo. No tiene la especialización de sus hermanas, y también dispone de menos potencia, pero 125 CV son más que suficientes en el segmento, y su precio de 12.999 € la convierten en un modelo realmente atractivo, que tiene todo lo necesario para que puedas disfrutar de ella.
El asiento regulable en altura es lo suficientemente bajo como para que sea accesible a cualquiera, ayudado por un recorrido de las suspensiones un poco menor. La agilidad de su chasis multitubular es proverbial, y tanto las suspensiones, aunque no tengan una gran capacidad de regulación, como su equipo de frenos, te van a permitir disfrutar con total seguridad de la conducción deportiva que quieras. Sin embargo, la carta extra con la que juega la KTM 1090 Adventure, es su capacidad camaleónica para servir igualmente como moto de uso diario, viajera incansable, e incluso para darse unos garbeos por el campo. Su mayor sencillez respecto a sus hermanas es también la llave de su polivalencia, porque podría considerase como la base de la que parten las demás.
Respecto a la KTM 1050 Adventure el avance es significativo gracias a un motor claramente más dotado, sin que ello repercuta en ningún otro apartado. Sigue siendo el modelo de entrada en la gama KTM Adventure, pero seguro que para muchos se convertirá en la opción que realmente deseaban, una moto que parece sencilla comparada con la sofisticación de sus hermanas, pero que realmente no hay más que compararla con cualquier modelo de su competencia para descubrir que realmente no la falta de nada.