- Yamaha MT-09. Ficha técnica y precio
- Yamaha MT-07. Ficha técnica y precio
Yamaha ha fortalecido la saga MT esta temporada con el lanzamiento de dos nuevos y atractivos modelos, los que hoy nos ocupan: la MT-07 y la MT-09. Pero realmente la familia MT, una siglas que estas alturas ya se sabe que hacen referencia a «Masters of Torque», nació en 2005. Su primera integrante fue la MT-01, una moto muy diferente de lo que había en aquel momento y con un enorme «V-Twin» de 1.670 cc en su interior. El año siguiente llegó otro modelo de la familia, la MT-03, que estaba en la misma línea de diseño, pero en el extremo opuesto en cuanto a dimensiones, propulsada por un monocilíndrico de 660 cc. Este modelo todavía se vende (6.299 €). Desde entonces no se añadieron más miembros a la saga, pero esta temporada han llegado estas dos monturas con mucho carácter y dos perfiles diferenciados, que llenan el segmento medio. Ademas de la pequeña MT-125, que es la verdadera puerta de acceso. Volviendo a nuestras protagonistas, es cierto que la MT-09 se presentó el otoño pasado y la MT-07 unos meses después, pero las dos son modelos 2014.
Yamaha ya tenía modelos naked que cubrían esas cilindradas y segmentos, como la FZ8 y la XJ6, pero el fuerte empuje de los fabricantes europeos ha obligado a los japoneses a buscar nuevas vías, como lo son estas MT, que cuentan con un toque más radical en cuanto a diseño. Las dos están marcadas por una carrocería llevada a la mínima expresión y líneas muy cortantes en su diseño, y también por una óptica delantera muy diferenciadora, que les da un toque «animal». Pero tienen diferentes cometidos, por un lado la «09» ha sido pensada para aquellos que buscan prestaciones y sensaciones. Muchos de sus actuales clientes son usuarios con experiencia que vienen de una deportiva y buscan algo más cómodo, o amantes de las naked deportivas. Por otro lado, la «07» es una moto económica y accesible, pero que tiene mucha fuerza en su diseño y se posiciona para atraer a un público más joven, de 20 a 35 años. Algo que ha quedado patente en el gran número de unidades que se han vendido limitadas hasta la fecha. Esta fórmula ha resultado ser un éxito, ya que se ha matriculado a un ritmo frenético. Aun así hay puntos donde las dos MT coinciden y comparten rango de acción.
Día a día
La moto puede tener un uso lúdico o también práctico y estas Yamaha cumplen perfectamente en ambos casos. Dado que no solo puedes divertirte a sus mandos el fin de semana en una ruta en carretera, también puedes usarlas para ir al trabajo o para tus que haceres diarios. Las naked han proliferado en los últimos tiempos, de manera que cuando llegas a un semáforo en las grandes ciudades son las siguientes después de los scooter. Tienen, como hemos dicho, un diseño similar, que se plasma en una ergonomía marcada por el manillar ancho. Mayor y ligeramente más elevado en el caso de la MT-09, que también tiene los estribos un poco más atrás, aunque las diferencias de posición de conducción no son muy notables. Coinciden en que sus asientos están bajos, a 795 mm la MT-07 y la 805 mm la «09», y llegas fácilmente con los dos pies al suelo, algo a lo que ayuda la compacidad de sus chasis y asientos en la zona del depósito. Sí es cierto que cuando bajas los pies en la MT-07 te puedes encontrar en el camino con los estribos, pero no llegan a molestar al realizar la maniobra. Otro punto que las convierte en motos muy manejables es su ligereza, dado que con el depósito de gasolina lleno la hermana pequeña pesa solo 181 kg y la mayor 189 kg, muy poco más.
En tu ruta ciudadana te encuentras como pez en el agua con cualquiera de las dos, si bien es cierto que la MT-07 es más manejable y fácil de llevar, debido a que gira de maravilla y te permite zigzaguear entre los coches con una soltura inaudita. Otro aspecto que le da un plus en cuanto a su movilidad es la respuesta del propulsor. El nuevo bicilíndrico en línea, llamado CP2, con el cigüeñal calado a 270º, y con la configuración «crossplane» que Yamaha ha puesto de moda, tiene una respuesta muy dócil y directa al mismo tiempo. Así que en los primeros giros del acelerador es muy predecible y «amigable» con su piloto, dándole al conjunto un gran equilibrio de funcionamiento. La MT-09 tiene en su interior un tricilíndrico en línea, CP3 en este caso y calado a 120º, que tiene la misma filosofía pero más prestaciones. Su respuesta es mucho más directa y eso se nota desde el primer milímetro de recorrido, donde ya tienes par llegando a la rueda trasera. Ofrece tres modos de gestión de motor, de los cuales el B es el más adecuado para una utilización urbana, ya que ralentiza la respuesta. Aun así siempre es rápida de reacciones, así que te obliga a estar más pendiente cuando la conducción requiere continuas aperturas y cierres del gas. También es más dura de embrague y cambio, pero solo si la comparamos con su «dulce» hermana. Una vez en marcha es suave y el motor no emite vibraciones.
Hay más detalles comunes que aprecias mientras te mueves por la ciudad o incluso antes de hacerlo... Como el nuevo y original pulsador de arranque, que se acciona hacia atrás y que hace las veces de botón de pare. Las instrumentaciones varían algo en su forma, pero en los dos casos se trata de un cuadro digital que ofrece la misma información, entre la que destaca la marcha engranada, el nivel de combustible, los consumos (medio e instantáneo) y las temperaturas (motor y aire). Además, no rompen en absoluto con la línea de la moto en la parte delantera, pero hay que manejarlos con dos pulsadores que hay integrados en su carcasa. Otro aviso que puedes ver en los cuadros es el de «Eco», cuando aparece quiere decir que estás realizando una conducción eficiente y que el gasto de gasolina es contenido. Si lo mantienes es posible conseguir consumos ligeramente inferiores a cuatro litros a 120 km/h en la MT-07 y algo por encima de cuatro en la «09».
Un paseo
Si sales a dar un «paseo» puedes encontrar una faceta muy interesante y entretenida de las «hermanas MT», ya que además de polivalentes son muy divertidas. Para los que tengan menos experiencia será mucho más fácil sacarle partido a la «07», que es tan accesible como divertida. Yamaha ha hecho un gran trabajo para ahorrar peso en su carrocería, chasis y motor. En cuanto afrontas dos curvas te das cuenta de las pocas inercias que tiene y lo bien que responde a tus órdenes. A sus mandos el piloto, muy bien ubicado, tiene sensación de control, de modo que te da confi anza desde un inicio. Es muy rápida de dirección, pero no llega a ser nerviosa. Las suspensiones son suaves, así que si frenas muy fuerte o haces apoyos muy rápidos, notas como se comprimen, pero nunca te hacen extraños y puedes predecir perfectamente sus reacciones. Otro punto a su favor es que puedes inclinar bastante sin que rocen los estribos, así que se convierte en un juguete en cualquier carretera de montaña. El motor, con 75 CV declarados y 70 verificados en nuestro banco, está muy logrado. Podría parecer poco potente si lo comparamos con las grandes naked, pero por su respuesta y relación peso-potencia cunde mucho. Las aceleraciones en marchas cortas te transmiten sensaciones y es tan lineal en su entrega que parece que estás conectado con la rueda trasera.
Gracias al eje de equilibrado no tiene vibraciones y los pulsos que produce la configuración «crossplane» son mucho más agradables que los de los otros bicilíndricos. Además, tiene un consumo muy reducido y aunque te animes se queda alrededor de cinco litros. Como ya hemos comentado está disponible en versión limitada a 35 kW, que es una elección habitual en este modelo, pero lo bueno que tiene es su facilidad de utilización incluso deslimitado. Cuando ruedas por carreteras sinuosas o hay poco agarre disponible, puedes acelerar sin problemas por su progresividad y buen tacto de gas, de manera que te transmite una gran confianza.
La MT-09 es una moto curiosa en su concepción, ya que tiene un chasis muy estrecho, una posición de conducción más erguida que otras naked de su segmento y unas suspensiones diferentes, mucho más firmes que las de la MT-07. La horquilla tiene más recorrido de lo habitual, 137 mm, y unos reglajes hidráulicos suaves de serie, de modo que produce una sensible transferencia de pesos y se mueve un poco cuando hay muchos baches. Lo bueno es que ofrece la posibilidad de regular la extensión, para frenar su velocidad de retorno. El amortiguador aguanta bien la transmisión de potencia en aceleraciones fuertes, pero tampoco está tan cómodo cuando hay muchas irregularidades en el asfalto.
En la práctica, en una carretera normal, la moto se comporta muy bien. Es ágil, menos que la MT-07 pero mucho más que la mayoría de sus rivales, y muy divertida en puertos de montaña. Los frenos, con pinzas de anclaje radial y discos de mayor diámetro, son más potentes que en el caso de su hermana pequeña, algo de esperar teniendo en cuenta su orientación más deportiva, pero como en aquella es fácil hacer derrapar el neumático trasero si apuras la frenada. Esto puede resultar divertido si lo buscas, pero si no quieres que suceda Yamaha ofrece ABS para estos dos modelos por 700 euros más. Un opción que siempre resulta interesante y te permite ir más relajado en condiciones de poca adherencia. En el tricilíndrico de la MT-09 podemos elegir entre tres modos de motor (A, B y Std), que se diferencian en la respuesta al acelerador, aunque sin demasiadas variaciones en los valores máximos (106 CV en el estándar y el A, y 95 en el B).
En cualquiera de ellos la moto tiene una entrega contundente, ya que el motor tiene par y está muy lleno en medios y bajos. Cualquiera insinuación se convierte en respuesta y enseguida en empuje, así que sales de la curva y en un instante estás en la siguiente. Es una conducción más exigente que la de la MT-07 pero también más divertida, especialmente para los que ya tengan experiencia. Pero además de directo es un motor agradable en marcha, por la finura de funcionamiento y la mencionada ausencia de vibraciones. Los consumos tampoco son muy altos a pesar de sus prestaciones, ya que se mueven entre seis y siete litros a los 100 km. Llama la atención que a pesar de ser motores con diferentes configuraciones, tienen un carácter similar, que Yamaha ha querido trasladar a sus modelos de calle y que desarrolló para las unidades de MotoGP. Si nos fijamos en las curvas de par se ve que, a pesar de los diferentes valores propios de la mayor cilindrada de la MT-09, las curvas que dibujan siguen un patrón semejante. En la prática también se nota que son motores llenos y directos en medios, pero que se dosifican muy bien. Así que el nombre Masters of Torque, maestras del par, tiene pues una justificación y se hace extensible a todos los modelos que tienen las siglas MT en su denominación. Todas las naked de esta saga están además llenas de personalidad y ofrecen una magnífica relación calidad-precio.
Conclusión
En este caso la elección de una de estas motos está bastante clara, ya que se ubican en segmentos diferentes y hay 2.000 euros de diferencia entre ellas. La MT-09 es una naked con un planteamiento deportivo y un «look» con mucho atractivo, que es indicada para los usuarios con experiencia y que buscan una moto con prestaciones. Tiene una competencia dura y evolucionada en la categoría, pero ofrece ese conseguido funcionamiento de las motos japonesas y el único motor tricilíndrico de ese país. Así que se trata de una moto diferente que además tiene un precio muy competitivo. Por otro lado los que acaben de sacarse el carné o están buscando una naked de cilindrada media tienen en la MT-07 una opción excelente. Debido a que además de ser una montura muy accesible y fácil de llevar, es también divertida y aunque tengas experiencia te puede sorprender por lo que se «deja hacer». Es una de las motos que ofrece mejor relación calidad-precio del mercado y eso que vivimos un momento en el que todas las marcas se han apretado el cinturón para ofrecer sus modelos al mejor precio. Por menos de 6.000 euros puedes tener esta MT-07 que tiene todo lo necesario para ser una moto de verdad y algo que muchas no tienen, personalidad.