Comparativa Nissan Juke-R vs Kawasaki Ninja ZX-10R

El universo de las dos y cuatro ruedas se enfrentan de nuevo. Un bestia como el exclusivo Nissan Juke R y sus 485 CV, contra la bella y poderosa Kawasaki Ninja ZX-10-R. Un desafío que nos propusieron nuestros compañeros de Autopista, y al que no pudimos resistirnos...

Óscar Pena. Fotos: Jaime de Diego

Comparativa Nissan Juke-R vs Kawasaki Ninja ZX-10R
Comparativa Nissan Juke-R vs Kawasaki Ninja ZX-10R

¿Sería capaz un nuevo prototipo de coche deportivo, único y muy exclusivo, capaz de imponerse frente al cronómetro a una superbike de calle actual? Los chicos de Autopista pensaron que podría ser posible, así que nos sugirieron esta comparativa tan especial. Y es que frente a vosotros está uno de los coches más exclusivos del mundo, y desde luego el utilitario más caro y deportivo. El Nissan Juke-R juega con lo excéntrico, lo desmesurado. Tiene incluso un punto, bastante intenso por cierto, de ilógico. Y por eso, de entrada va acompañado de un completo equipo de mecánicos...  La Kawasaki ZX-10R es algo más discreta, y pequeña claro. La recogimos el día antes uno de los concesionarios de la marca en Madrid, la subimos en la furgoneta y tomamos rumbo al circuito de Albacete. El cronómetro esperaba ansioso...

La maquina total. Así podríamos denominar al bestial Nissan Juke-R.  Apenas se producirán un puñado de ellos y su desorbitado precio rondará los 500.000 €. Sí, has oído bien, medio millón de euros... A cambio, Nissan te propone un utilitario de colección, fabricado íntegramente en fibra de carbono, y con un motor demoledor. El V6 de 3.799 cc que lo anima es el mismo que el utilizado en el Nissan GTR 2010, que directamente ha sido transplantado de un coche a otro y acoplado «con calzador».  En realidad casi todo lo que ves tiene su origen en el GTR: transmisión, frenos, suspensiones, etc. Eso sí, acometiendo las oportunas modificaciones. Por ejemplo, el sistema de aire acondicionado se sitúa en la parte trasera (delante no cabe); y como la batalla no coincide, se corta el árbol de transmisión central por la mitad, sustituyendo el de carbono original por otro de acero.

Así las cosas, las sensaciones que transmite son brutales, y sinceramente, e independientemente del tiempo que hiciera o no frente al cronómetro, el Nissan Juke-R es una autentica barbaridad. Acoplado en su asiento, te sientes un piloto de verdad, y la aceleración, reacciones y comportamiento, te hacen sentir el amo del mundo... Ahora bien, es un coche realmente nervioso en relación al GTR del que deriva, excitante, pero delicado. Un «aparato» para profesionales que es en realidad hasta 4 segundos más lento en una vuelta que el coche del que deriva. Todo un abismo. Y no precisamente en mis manos, no. Sino en las de Marcos Martinez (piloto de GP2, Superleague, World Series, F3...), que nos acompañó en esta particular comparativa representando al programa de televisión «Más que coches», que filmó «el choque».

Veloz, silenciosa, letal. La Kawasaki Ninja ZX-10R es la mejor superbike japonesa del momento, y el vehículo de dos ruedas perfecto para enfrentarse al dinosaurio del país del «sol naciente». Japón contra Japón. Eso sí, su precio apenas equivale al de las solas llantas ultraligeras del Nissan, lo cual no deja de ser, por otro lado, una buena noticia para los moteros...

En su configuración de serie ofrece un excelente comportamiento. Para la prueba ajustamos las suspensiones en la medida de lo posible a las características particulares  de la pista manchega, y sustituimos los neumáticos originales por otros más adecuados a semejante reto. En concreto contamos con la colaboración de Pirelli, que nos cedió un juego de slick en compuestos SC1 delante (blando), y SC2 detrás (duro), para garantizarnos el máximo agarre y duración. Por lo demás se mantuvo estrictamente de serie. Ergonomía, altura de estribos, etc, todo está en su sitio y pensado para disfrutar en pista vuelta tras vuelta sin descanso. El Nissan, por su parte y a pesar de todo, cada dos o tres vueltas necesitaba descansar, para no desintegrar los frenos ni el motor, que sometido a la máxima exigencia se calentaba más de lo deseado. Pero claro, cualquier coche «de calle» es incapaz de soportar el castigo que sí puede llegar a hacer una de nuestras superbike. También llama la atención en la Ninja Kawasaki ZX-10R su larguísimo desarrollo del cambio, más que en muchas de sus rivales, que si bien favorece la entrega dulce de toda su potencia, no es menos cierto que la ralentiza un poco al sólo poder unas las tres primeras velocidades, pues con la cuarta en cualquier punto se te acabó el circuito.

Así las cosas el resultado no podía ser mejor para los intereses «moteros», y la diferencia de tiempo, ¡8 segundos! no la esperábamos ni en la mejor de nuestras predicciones. 1,45´5"  contra 1,37´1", en un día bastante frío aunque soleado, no era el guión previsto, sobre todo tras oír el indescriptible bramido del V6 a la salida de los virajes...

Equipados ambos vehículos con toda suerte de componentes electrónicos, registramos multitud de datos gracias a los cuales pudimos extraer muy interesantes conclusiones. Así, el mito de la mayor velocidad de paso por curva de los coches sobre las motos se esfuma, y la igualdad entre ellos es manifiesta, como podemos observar en los cuadros adjuntos. De hecho, en las curvas más rápidas sorprende la moto por su superior velocidad de paso. En este sentido, vale que la moto fuera calzada con neumáticos más específicos para pista, pero el Nissan tampoco iba descalzo...También comprobamos que apenas recorremos unos metros tras las susodichas curvas, y la moto comienza a enderezarse, esta sale catapultada hacia delante sacando unas considerable ventaja al Nissan Juke R, gracias a su aceleración, claramente superior. Y eso nos sorprende, más si ves a pie de pista a «Gozzilla» y su despliegue de poder, que asusta.

Por tanto parece que cuando estamos a los mandos de nuestras monturas, subestimamos bastante sus bestiales cualidades... Eso sí, al llegar a las frenadas, el Nissan emplea bastantes menos metros, haciendo cierto en este caso la teoría de que cuatro ruedas frenan más que dos. Aunque también hay que decir que la moto llega bastante más rápido a las frenadas, por lo que se compensa bastante la balanza. Sea como fuere, las sensaciones son completamente diferentes, y la ventaja de la Kawasaki Ninja ZX-10R insalvable.

Así las cosas, un F1 es claramente más rápido que una MotoGP, pero un Nissan Juke-R, o cualquier deportivo derivado de serie, está muchísimo más lejos frente al cronómetro del coche de Fernando Alonso, que una «hi-sport» de calle de la de Jorge Lorenzo. Quizá en este hecho radique la gran diferencia entre estos dos excitantes y espectaculares vehículos.