Cuerpo a cuerpo Harley-Davidson Street Glide Special - Indian Chieftain Limited

Existe un gran número de usuarios a los mandos de sus custom que deciden disfrutar con ellas del placer de viajar. ¿Por qué no? Encontramos en estas dos americanas un paso más para alcanzar el éxtasis en ruta... o para lo que se te ocurra. Por falta de carácter no será.

Luis López Lozano. Colabora: Sergio Romero. Fotos: Juan Sanz

Cuerpo a cuerpo Harley-Davidson Street Glide Special - Indian Chieftain Limited
Cuerpo a cuerpo Harley-Davidson Street Glide Special - Indian Chieftain Limited

El mundo de la moto es así, se rige por impulsos emocionales y la razón, cuando interviene, pocas veces se convierte en el argumento decisivo para disfrutar sobre dos ruedas, ¿o tal vez sí? Esto es justo lo que nos proponen Harley-Davidson e Indian, dos marcas que tienen cierta relevancia en esto de producir motos con arraigo americano, cuyo calado ha ido mucho más allá de sus fronteras demostrando lo dicho más arriba: la pasión se impone por encima de todo.

Esa manera de entender el mercado de la motocicleta ha sido la artífice para crear una corriente muchas veces copiada, pero nunca superada en ciertos aspectos. ¿Qué sucedió con la maraña de custom japonesas que lucían palmito en los concesionarios oficiales? Hoy son parte de un hermoso pasado en el que americanas y japonesas marcaban el territorio a su manera, unas con derroche de decibelios, otras con contención de vibraciones y dulces mandos. Había para todos.

Cuerpo a cuerpo Harley-Davidson Street Glide Special - Indian Chieftain Limited

Cuerpo a cuerpo Harley-Davidson Street Glide Special - Indian Chieftain Limited

El paso del tiempo ha dado la razón a unos, y a otros los ha arrinconado al mercado del vehículo de ocasión; no se sabe muy bien si de forma justa o no, pero lo cierto es que han desaparecido del mapa casi, casi, de un plumazo. Sea cuales fueren las circunstancias, han sido los americanos los que finalmente se han convertido en los reyes y únicos amos del custom. Así, no nos debe extrañar que hayan sido ellos los impulsores de este peculiar universo, ya sea paseando por las calles de nuestras ciudades o viajando, independientemente de lo cercano o lejano que se sitúe el destino. Lo que realmente importa es degustar cada kilómetro a sus mandos por lo que, ya que estamos en estas lides, ¿por qué no las adecuamos un poco más al desempeño de tales funciones?

EL RESULTADO

Con ese espíritu nacen estas peculiares y atractivas norteamericanas. Son motos con un carácter bien definido, custom hasta las cejas, pero convenientemente adaptadas a futuras rutas que se presenten en el horizonte de tus vacaciones o, para qué esperar más, cualquier fin de semana. Toda excusa es buena para encontrar el momento, marcar la ruta en sus navegadores, arrancar y dejar atrás lo mundano para adentrarse en un universo mucho más atractivo que el que nos rodea.

Sí, ya sabes que las dos nos vienen del país de las libertades y Trump, pero no es menos cierto que cada una interpreta a su manera esto de marcharse lejos de casa con una custom entre las piernas. Habrá quien diga que "el original" es causa y obra de Harley-Davidson, mientras que otros clientes más residuales, pero no menos importantes, opinan que ese espíritu "poderosamente americano" viene presentado en un envoltorio potente definido por la marca del indio a ambos lados del depósito de gasolina... aunque tal vez aquí le quede mejor llamar a esta importante pieza de la moto "tanque"; algo que veo más adecuado para un coche que para una moto. ¿Acaso tratamos hoy con modelos estándar? Nada de eso. Merecen cualquier otro calificativo que no les relacione con lo convencional. Faltaría más. Y en sus enormes depósitos de más de 20 litros encontramos un ejemplo.

Cuerpo a cuerpo Harley-Davidson Street Glide Special - Indian Chieftain Limited

Cuerpo a cuerpo Harley-Davidson Street Glide Special - Indian Chieftain Limited

Otra muestra de ello es la llanta elegida para equipar el tren delantero. Las 19 pulgadas llaman la atención en motos que de forma habitual se hacen valer de gruesos neumáticos. Aquí lo estrecho de la goma marca tendencia y el diseño de las llantas, también. En contra de lo que se pueda pensar antes de rodar con ellas, y a la vista de sus esculturales líneas, ofrecen cierta agilidad que agradeces cuando la línea del asfalto comienza a cambiar de dirección... porque rodar siempre en línea recta resulta un tanto aburrido. Ninguna de las dos defrauda ni con carga, aunque si parte de ella la representa el pasajero, aquí existen diferencias que deberás tener en cuenta si sueles moverte con acompañante: mientras la Street Glide Special prefiere ofrecer una línea descendente en el diseño de su asiento, con un espacio mínimo para el de atrás, la Chieftain Limited aporta más cobertura para su regocijo. Ahora bien, ninguna de las dos ha decidido montar un par de plataformas para acomodar sus pies. Todo parece indicar que estas americanas prefieren perderse por cualquier carretera en solitario...

Cuerpo a cuerpo Harley-Davidson Street Glide Special - Indian Chieftain Limited

Cuerpo a cuerpo Harley-Davidson Street Glide Special - Indian Chieftain Limited

LAS GARRAS DEL ÁGUILA DE MILWAUKEE

El atractivo de cualquier Harley-Davidson resulta irresistible, no ya solo para su propietario, sino para todo aquél que le rodee. Solo tienes que sacarla del garaje para comenzar a experimentar ese magnetismo que clava todas las miradas en ella. Supongo que gran parte del mérito se lo lleva el peculiar sonido "trademark" de la firma de Milwaukee. Parece como si las garras del águila que representa a la marca se apoderasen del entorno. No solo se escucha con total claridad varias manzanas alrededor, sino que también se siente.

Gran parte del mérito de esta Harley-Davidson se lo lleva el peculiar sonido "Trademark" de la firma de Milwaukee

Una vez situados en el universo H-D, la dinámica es la habitual en los modelos del catálogo norteamericano. Al insertar la primera velocidad, el ruido nos deja claro que ha quedado engranada, con su "clonk" metálico característico. El embrague, algo duro para pilotos faltos de costumbre en estas lides, ofrece una progresividad algo justa en arrancadas, aunque en realidad no se necesita grandes dosis de maestría y coordinación teniendo en cuenta la capacidad de traccionar del gran bicilindrico de 1.868 centímetros cúbicos.

Las enormes plataformas acomodan perfectamente los pies, mientras que el asiento es un sofá orejero como no podía ser de otra forma. Las manos caen a media altura y sorprende lo recortado de la cúpula, lo que define en parte y, sobre todo, junto con la llanta delantera de goma estrecha, el carácter de esta americana. Las maniobras a baja velocidad no son lo suyo, ya que el mero hecho de girar por completo la dirección implica una caída instantánea de la moto hacia ese costado. Sin duda, prefiere moverse en relaciones más largas que la primera para disfrutarla en su justa medida, donde la sensación de control se apodera de su piloto con mayor ahínco.

Cuerpo a cuerpo Harley-Davidson Street Glide Special - Indian Chieftain Limited

Cuerpo a cuerpo Harley-Davidson Street Glide Special - Indian Chieftain Limited

Si de ración de vibraciones se trata, la presentada en esta Harley-Davidson es superior a la de su contrincante en esta prueba. Sé que hay muchos usuarios de la marca que idolatran este detalle en concreto, entre los que me encuentro después de haberme recorrido España de punta a punta a los mandos de todo tipo de H-D. Desde luego y como te he comentado antes, el pulso del motor se ve y se nota, pero en absoluto molesta. De hecho, acompaña durante la ruta y te recuerda que vas a los mandos de una auténtica Harley-Davidson, no otra. La duda ofende.

Indian siempre ha buscado un carácter propio en sus creaciones. Una prueba la encontramos en esta Chieftain Limited

Prácticamente todo, desde los mandos, pasando por la disposición y número de esferas que componen la instrumentación, nos trae a la memoria el legado de las grandes "touring" bajo la denominación Electra Glide. El nuevo toque Street, junto con el apellido Special, le sienta de maravilla, y si bien las comparaciones suelen ser odiosas, lo cierto es que la "delgadez" de esta H-D, junto con la escasa capacidad para llevar un pasajero contigo, demuestra que se trata de una Glide con tintes sport, lo que implica un uso individual de la motocicleta cualquiera que sea la faceta que pretendas explotar de ella.

Cuerpo a cuerpo Harley-Davidson Street Glide Special - Indian Chieftain Limited

Cuerpo a cuerpo Harley-Davidson Street Glide Special - Indian Chieftain Limited

NO ES COPIA

Desde un principio, o dicho con unas palabras que acoten mejor el producto, desde el inicio de la nueva era de Indian en el mercado, no entraba en sus planes copiar nada ni a nadie. Siempre ha buscado un carácter propio y buena prueba de ello la encontramos en esta Chieftain Limited. Aunque no he hecho tantos kilómetros a sus mandos como con otras H-D, también he recorrido la Península y parte de nuestras islas con un motor Indian entre las piernas, y he de decir que el "feedback" obtenido ha sido parecido a... nada. El sonido de la admisión, la entrega limpia y temprana de potencia, el tacto del gas al abrir o incluso al cortar con una retención limpia y enérgica, lo bien que frena sin necesidad de tirar de la palanca o pisar el pedal derecho sin medida... En el equilibrio general de una moto en la que todo va como debe ir, ni más ni menos, encontramos uno de sus principales valores; algo que consigue por sí misma, con méritos propios y sin necesidad de mirarse en el espejo de otros o picotear un poco de aquí y otro poco de allá.

Cuerpo a cuerpo Harley-Davidson Street Glide Special - Indian Chieftain Limited

Cuerpo a cuerpo Harley-Davidson Street Glide Special - Indian Chieftain Limited

Con un ligero toque al botón de arranque el motor cobra vida. Los enormes pistones de su 1.811 cc bicilíndrico comienzan a subir y bajar emitiendo un sonido poderoso, suave pero contundente, enérgico pero sin estridencias. Es algo así como si quisiera pasar desapercibida, aunque tú y yo sabemos que eso es algo, en cierto modo, complicado. ¿Con su planta y ese rojo que brilla sin pudor al tomar contacto con la luz del sol? Imposible. Búscate a otra si no te gusta que desnuden tu moto en cada semáforo. La Chieftain Limited se mueve con sorprendente soltura entre el tráfico, siempre pisando fuerte con su delgado neumático anterior y muy firme al confiar en su frenada, inmediata, directa al tacto y con un mordiente que, como te digo, no necesita de una presión excesiva sobre los mandos. El cambio no es ni corto ni largo de recorrido; tampoco ofrece un ruido exagerado en la mayoría de operaciones que hagas con él. Pero sin lugar a dudas, además del correcto funcionamiento de la caja de 6 relaciones, destaca al mismo nivel tanto el tacto como la escasa fuerza que debes aplicar para accionar el embrague. Los desplazamientos urbanos parecen querer dar la razón a la Indian respecto a la Harley-Davidson si tenemos en cuenta el rendimiento general. Un conjunto que vence y convence en muchos detalles, incluido ese pasajero al que puedes llevar de un lado a otro de la ciudad sin mayores apreturas que la cantidad de tráfico en hora punta.

¿Cúal puede ser el límite de estas motos en busca de los más lejanos horizontes? Lo cierto es que alguno sí que parece...

De la finura de su transmisión final por correa dentada en las constantes aceleraciones, aperturas y cierre de gas girando de calle en calle, parando de un semáforo a otro, no te he hablado todavía, pero puedes aplicarlo de forma directa al rendimiento que ofrece esta Indian en carretera abierta. Bien es cierto que no necesitas jugar tanto con el gas en plena ruta, pero si la carretera te lo exige, no te preocupes, porque descubrirás otra forma de disfrutar de la Chieftain Limited. A la capacidad de traccionar a prácticamente cualquier régimen incluso en marchas largas, se le une un sonido de admisión extraordinario que acompaña a las pistonadas "made in Indian" que te alegran el día. Todo resulta tan armonioso que no dan ganas de parar ni para repostar, lo que en cierto modo tienes resuelto sin demasiado esfuerzo, ya que su depósito de 21 litros de ofrece una autonomía que roza los 400 kilómetros.

Cuerpo a cuerpo Harley-Davidson Street Glide Special - Indian Chieftain Limited

Cuerpo a cuerpo Harley-Davidson Street Glide Special - Indian Chieftain Limited

¿Cuál puede ser el límite de esta Indian en busca de lejanos horizontes? Supongo que algo tan sencillo y vital como llevar el equipaje a cuestas. Dispones de un juego de maletas rígidas, pero claro, el estilo americano es de llevar poco a cuestas, dormir en un motel de carretera, lavarte la ropa en el baño de la habitación y disponer de ella seca a la mañana siguiente; las tórridas noches americanas son así, donde sudar tumbado en la cama mientras ves la tele por cable, es de lo más típico del lugar.

CONCLUSIÓN

Les une algo más que sus cúpulas recortadas o las maletas de apertura superior y capacidad exigua. Derrochan un caracter tal que detalles como este último resultan nimios a lado de sus imponentes motores, cuadros con navegador e información analógica y digital; porque los nuevos tiempos requieren de tecnología actualizada, sí, pero también de un marcado estilo que otorgue personalidad. Bien lo saben y así han desarrollado sus principales características a modo de reclamo.

Pero como suele suceder cuando te enfrentas a un gigante como Harley-Davidson, el reto se multiplica por mil. Aquello de unirse al enemigo si no puedes con él, no siempre funciona. Esa es la lectura que ha debido hacer Indian con su catálogo, y en concreto con la Chieftain Limitedque aquí nos ocupa. Sí, los carenados recortados y las llantas de 19 pulgadas equipando estrechos neumáticos marcan tendencia como se dice ahora, pero mientras Harley-Davidson ha pretendido prolongar su esencia en su Street Glide Special, Indian ha preferido emplear dichos elementos comunes, como también lo son la pareja de maletas tan rígidas como estrechas, para conseguir una moto de equilibrio asombroso, fácil de pilotar pese a la enorme masa en movimiento, cómoda para dos ocupantes, y con un motor que no se parece en nada a lo que hayas podido experimentar hasta ahora. Supongo que continuar la senda de la marca de Milwaukee hubiera sido una solución directa para acudir a su linea de flotación, pero lo que en realidad sorprende en la Indian es, precisamente, el camino elegido para llamarte la atención.

No encontramos en la Chieftain ese toque de cierta rudeza que caracteriza a cualquier Harley-Davidson. Un carácter que a muchos nos tiene enamorados, pero que no siempre es del agrado de todos cuando, por ejemplo, buscamos llevar un pasajero con mínimas garantías de confort; lo que en la H-D es un suplicio, en la Indian se convierte en un placer. Por otra parte, el suave rodar de la Chieftain Limited entre el tráfico urbano tampoco puede equipararse con el más "férreo" de la de Milwaukee, con un embrague más duro y menos progresivo, así como un cambio ruidoso que no molesta, pero tampoco alcanza los estándares de su competidora.

Cuerpo a cuerpo Harley-Davidson Street Glide Special - Indian Chieftain Limited

Cuerpo a cuerpo Harley-Davidson Street Glide Special - Indian Chieftain Limited

Ficha técnica Harley-Davidson Street Glide Special

Ficha técnica Indian Chieftain Limited