La Hyosung ST7 ya pasó por nuestras manos el pasado verano, pero ahora lo hace transformada en turística gracias al kit de accesorios originales que comercializa para ella Hyosung. De entrada, la ST7, cuyo significado proviene de las siglas de S&T Motors Company más el 7 que da una pista sobre su cilindrada aproximada (casi 700 cc; 678 cc para ser exactos) es más rutera y bastante más clásica que la Aquila 650i, tanto en su aspecto externo, como en su carácter.
A aquélla se le achaca que su motor es demasiado puntiagudo para este segmento, en el que es preferible un vigoroso rendimiento a bajo y medio régimen, que una buena estirada final. De ahí que Hyosung se decidiera a lanzar el modelo que nos ocupa, de prestaciones más contenidas (unos 5 caballos menos que la Aquila según nuestras mediciones a pesar de gozar de mayor cilindrada) y algo más acordes con este estilo. De hecho, a pesar de no ganar par al aumentar la carrera del bicilíndrico refrigerado por líquido de la Aquila, sí que es cierto que estira menos y gana algo de finura en medios y bajos, siendo por ello más indicada para el pausado ritmo que exigen este tipo de motos. Pero bueno, como te he dicho al principio, ya te explicamos cómo va la ST7 en el número 2.2.37 de MOTOCICLISMO, así que hoy me centraré en lo que aportan los accesorios que lleva montados esta unidad.
Fundamental
Es el mejor calificativo para la pantalla frontal que preside la lista de accesorios y que a mi juicio es el más útil de todos ellos. De buenas dimensiones y estética sobria, se convierte en una aliada perfecta cuando tus brazos tienen que adoptar la postura que un iniciado en la práctica del yoga denominaría «el abrazo al viento». Conella, quedas a salvo de su azote sin tener que mirar a su través, ya que queda por debajo de tu visión. No vibra ni crea molestas turbulencias y te permite conducir más relajado y explorar velocidades de crucero que sin ella, no ya la DGT, sino también tu fisioterapeuta te prohibiría.
En el extremo opuesto, en loque a utilidad se refiere, estaría el adorno de piel cosida en hilo rojo que discurre junto al panel de instrumentos, un detalle por otro lado muy vistoso como puedes ver arriba. Además, combina a la perfección con las alforjas rígidas forradas en piel, con la bisagra de aluminio y con los mismos acabados mencionados, que incluyen el logo ST7 en bajorrelieve, como en el caso del protector del depósito. Forradas de fieltro en su interior y con un tamaño en el que casi cabe un casco integral, no les entra agua, al menos a priori.
Las plataformas para los pies del piloto también van firmadas, mejoran la postura original y combinan con la cómoda palanca de cambio tipo puntera-tacón, que encaja de maravilla en una moto de este tipo. Tanto que al
final dejas de usar el empeine y no precisamente por preservar tu calzado, sino simplemente porque, sobre todo si tienes el pie grande, te será más intuitivo pisar atrás para subir marchas que meter el pie por debajo de la pequeña palanca.
21.000 gramos
A diferencia de otras motos de su segmento en las que rozas con excesiva facilidad con poco que inclines, en ésta, aún con los 21 kilos largos extra que suponen los accesorios que lleva montados, no arrastra a la mínima. Sin embargo, no te confundas y te animes porque lo primero que rozarás con el asfalto no serán las plataformas dotadas de avisadores y que bascularían en ese caso reduciendo el peligro (aunque la derecha se apoya rápido en los voluminosos escapes y hace tope), sino las defensas.
Éstas tienen unas dimensiones acertadas y te ayudan a calcular si cabrás o no entre el hueco. Si pasas con ellas, no habrá peligro de que te dejes una de las maletas laterales en el trance o las piernas de tu acompañante. Hablando de él, Hyosung no se ha olvidado del pasajero y éste gozará de un respaldo no muy alto, pero que mejora algo la posición de la moto estándar, algo comprimida por cierto. Sus estribos no, pero estéticamente son más vistosos que los de serie.
En suma, con el kit turístico, Hyosung afi na un poco más una cruiser que incluso con el desembolso extra que supone su adquisición, sigue siendo competitiva en precio. Un dato interesante es que al menos hasta el 31 de marzo, fecha en la que expira la oferta por la cual la ST7 «pelada» cuesta 900 euros menos que lo que estipula su tarifa normal, te puedes llevar a casa la moto tal y como aquí la ves, pertrechada con este kit que convierte esta cruiser en una touring, por 7.546 euros.