Cuando MV Agusta presentó la Superveloce en el Salón de Milán muchas bocas se quedaron abiertas de sorpresa, y aún deberían permanecer así si tenemos en cuenta que la moto que finalmente MV Agusta ha lanzado a la serie no se aleja casi nada de aquel prototipo. Habría que preguntarse si hay en el mercado alguna moto más sexy y deseable que este Superveloce que inspira una vuelta a los '70, cuando la firma italiana todavía dominaba el Mundial en las categorías superiores.
El cuidado de cada detalle es casi enfermizo, no hay más que fijarse en el faro y la luz trasera de un solo led, los tres escapes que sobresalen, la correa de cuero falsa sobre el depósito de gasolina sin un propósito concreto, pero que no puede dejar de admirar. Se han ocultado todos los anclajes del carenado y los tornillos antiestéticos para dar la apariencia de que esta carrocería esculpida de los '70 está flotando. Y lo mejor de todo es que la base es la F3 en su versión de 800 cc, una moto construida para los circuitos y las carreras.

MV Agusta Superveloce: Mismo rendimiento
La potencia máxima es la misma de la F3 que se lanzó por primera vez en 2013, 148 CV a 13,000 rpm, y tanto su curva como la de par idénticas. Sin embargo, la Superveloce tiene un sistema de admisión ligeramente diferente por la modificación de los conductos que llegan a la caja de aire. La cifra de potencia máxima no impresiona teniendo en cuanta que las actuales mil superan los 200 CV, pero sigue siendo una cifra alta que es muy utilizable. No tienes que estar cambiando constantemente como en una supersport en busca de la potencia del tricilíndrico, en el que el cigüeñal gira en sentido contrario a las ruedas. Hay potencia utilizable abajo y luego realmente comienza a despegar y correr desde la mitad del tacómetro. Tienes cuatro modos de conducción: Sport, Race, Rain y un modo personalizado.
Es cierto que tienes suficiente par como para no tener que usar el cambio en busca de régimen ni siquiera en carretera, pero el motor suena tan bien que muchas veces no puedes resistirte a escuchar aullar los tres escapes. Los cambios se realizan sin esfuerzo y el asistente funciona muy bien con una palanca muy suave, que subiendo marchas se asemeja a una moto de carreras, y también funciona muy bien a bajo régimen. El motor se encuentra realmente en su zona preferida cuando supera el medio régimen, y en primera y ocasionalmente en segunda, el control de tracción de ocho niveles tiene que trabajar para mantener la rueda delantera en contacto con el suelo. De todos modos, el cigüeñal, que gira en sentido contrario, se combina con la posición adelantada del conductor para lograr que no sea una moto que tienda a levantar la rueda y no necesitas estar pegándote con la parte delantera para mantenerla fija en el asfalto, la Superveloce simplemente empuja hacia adelante.

La Superveloce puede parecer simplemente un ejercicio de estilo, pero no te confundas, sigue siendo una moto deportiva de más de 250 km/h debajo de ese vestido retro. Es como Usain Bolt con un chándal de los '70. Las primeras F3 tenían un funcionamiento poco sofisticado a bajo régimen, oscilante y a veces brusco, que con la evolución de su programación electrónica se ha ido solventando. En el modo Race, como era de esperar, la respuesta es muy directa, pero ya en el Sport es mucho más suave y fácil de usar.
MV Agusta Superveloce: Con cambios
Aunque tanto la horquilla como el amortiguador son idénticos a los de la F3, se cambiado el sistema de bieletas trasero y el tarado de la horquilla, y el resultado es una suspensión deportiva, pero no demasiado dura, no llega a ser la de una moto de carreras capaz de circular por carretera, aunque no tenga unos muelles tan suaves como por ejemplo los de una Triumph Daytona. Igual que ocurre con el motor, cuanto más deprisa vas mejor trabajan las suspensiones frente a las cargas en las frenadas, aceleraciones y curvas. De hecho la puedes meter en un circuito y tendrás pocas quejas si mantienes los neumáticos de calle. Se siente como en casa en secciones rápidas, suaves y fluidas. Desde luego mejor que sobre baches, en los que puedes llegar a notar como sacude la cabeza. Además la posición de conducción es bastante radical, el asiento duro, dos peculiaridades que la convierten en poco apta para la ciudad. Al igual que las suspensiones, las pinzas radiales Brembo son las de la F3, y sin una IMU que mida el ángulo de inclinación, el ABS ajustable es convencional. No es que haya problemas, pero podría haberse esperado un ABS de funcionamiento en curva en un modelo premium de 2021.

El cuadro es el más actual de la firma italiana.
La ausencia de la IMU también provoca que el control de tracción no sea sensible a la inclinación. Sin embargo, su funcionamiento es suave y sin esfuerzo, y además es muy fácil de manejar para cambiar de nivel, igual que los modos de conducción. La pantalla TFT de 5 pulgadas a todo color dispone de una navegación fácil y tienen gráficos simples, además de estar en una posición correcta detrás de la pantalla retro, no como en la. Brutale 1000RR, en la que está cerca del tapón de gasolina. También integran conectividad y la comunicación Bluetooth con la aplicación MV Ride, que es simple y fácil de usar. Su único inconveniente es que son difíciles de leer cuando el sol está bajo y detrás de ti. El control de crucero y el asistente de cambio son de serie. Y tienes algunos accesorios para jugar, piezas de fibra de carbono, ruedas de radios de aluminio CNC, o un escape Arrow de circuito que aumenta la potencia a 153 CV con un aspecto impresionante y dos tubos por la derecha y otro por la izquierda.
La Superveloce no desmerece en absoluto al resto de sus hermanas en cuanto a comportamiento deportivo, pero es una moto con una estética única, un concepto que no encontrarás en otra moto, especialmente si tenemos en cuenta que mantiene inalterada la filosofía de MV Agusta, una marca que nunca se ha andado por las ramas.

MV Agusta Superveloce: Datos oficiales
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Precio: 20.000 €
Motor: 3 cil. en línea. Refr: líquida| Distribución: DOHC 12 V| Diámetro x carrera: 79,0 x 53,3 mm| Cilindrada: 798 cc| Compresión: 13,3:1| Potencia máx. dec.: 108 kW (148 CV) a 13.000 rpm| Par máx. dec.: 88 Nm a 10.600 rpm| Alimentación: 3 Inyectores. Toberas de 50 mm| Modos de conducción: 4| Ayudas electrónicas: TC | Acc. Embrague: Cable| Cambio: 6 relaciones| Transmisión sec.: Cadena| Chasis: Multitubular de acero con placas de aluminio traseras| Basculante: Monobrazo de aluminio| Geometría: 24°/99 mm| Suspensión del.: Horquilla invertida| Diámetro barras/Recorrido: 43 mm / 125 mm| Reglajes: Tres vías| Suspensión tras./Recorrido: Monoamortiguador / 123 mm| Reglajes: Tres vías| Freno del.: 2 discos de 320 mm| Pinzas: 4 pistones| Freno tras.: Un disco de 220 mm| Pinza: 2 pistones| ABS Tipo / Desconec.: Estándar / No| Rueda del.: 120/70-17". Llanta 3,50"| Rueda tras.: 180/55-17". Llanta 5,50"| Medidas. Cap. Depósito: 16,5 l| Peso lleno: N.D| Dist. entre ejes: 1.380 mm| Altura asiento: 830 mm.
MV Agusta Superveloce: Nuestras prestaciones
Velocidad máxima: 252 km/h| Aceleración- 0-100 km/h: 3,0 s / 50 m| 0-400 m: 11,2 s / 216 km/h| 0-1.000 m: 20,1 s / 248 km/h| Recuperación. 60-100 km/h: 3,7 s / 92 m| 60-140 km/h: 7,9 s / 221 m| Peso lleno: 207 kg| Reparto (lleno con piloto): 51,9 / 48,1 %| Consumo medio: 6,1 l/100 km| Autonomía: 265 km.

MV Agusta Superveloce: Nuestra conclusión
Podríamos simplificar mucho concluyendo que la nueva MV Agusta Superveloce, es básicamente una F3 800 con nuevos relojes, un estilo impresionante y unas suspensiones revisadas. Toma una de las motos con mejor comportamiento deportivo de su categoría, incluso de todo el segmento medio, manteniendo su impresionante motor de tres cilindros en línea, haz que suene genial y cúbrelo con una carrocería de un estilo único e inspirador. No arregles lo que no está roto. Con estas premisas MV Agusta no podía fallar. Hablamos de una deportiva de aspecto retro que puede superar a motos deportivas enfocadas al circuito. No es la moto más cómoda, especialmente en ciudad, su cúpula es demasiado baja para la autopista, un posible pasajero tendrá que ser valiente o estúpido. Si puedes vivir con la incomodidad y el precio, te enamorarás cada vez que abras el garaje y aprietes el botón de arranque.