El de Assen ha sido un fin de semana increíble, literalmente. Nadie hubiera adivinado que la primera carrera del sábado se tendría que aplazar al sábado por una nevada en el circuito holandés. Y aunque las condiciones de la pista no estaban para buscar el límite de los Pirelli, Álvaro Bautista volvió a sacar su mejor cara para adaptarse a una situación compleja y sacarle el máximo provecho. Allí donde Jonathan Rea reinaba incluso a bordo de la Honda CBR1000RR, el de Ducati ha firmado un nuevo pleno: ya son once victorias consecutivas, igualando el récord histórico de la categoría.
"Estaba siendo un fin de semana importante y positivo para nosotros, empezamos el viernes con malas sensaciones pero pudimos enderezar la situación desde el setting base", reconocía Álvaro tras la primera carrera. Lo cierto es que los resultados del viernes, con Tom Sykes dando la sorpresa, indicaban que podríamos estar ante la carrera más reñida de lo que llevamos de temporada. Por fin, parecía, el pelotón podía dar caza al talaverano que hasta ese momento no había mostrado ninguna piedad sobre su Ducati Panigale V4R.
Y así fue, la diferencia de Álvaro respecto al segundo clasificado se había acortado pero no lo suficiente como para discutirle la primera posición. ¿La clave? No perder la concentración: "En carrera las condiciones eran difíciles, con mucho frío, donde nosotros sufrimos siempre un poco más, además en esta pista que no es la mejor para la Ducati. Hemos sido competitivos y hemos podido tirar hasta al final, sin relajarme".
Fue en la segunda, ya con el asfalto algo más templado, donde pudimos ver una pelea más cerrada. "Desde luego me he divertido más porque en la primera vuelta no me esperaba a Jonathan en cabeza de carrera, ha hecho una salida increíble ganando posiciones y poniéndose en cabeza", comenta Bautista sobre la estratosférica salida de Rea desde la parrilla de Assen, del octavo al primer puesto. A rueda de Rea, tocaba estudiar sus movimientos, "he intentado estar con él para ver qué ritmo ponía y estudiarle, porque él aquí va muy rápido. Me di cuenta que quizás iba un poco despacio, quería un grupo más grande para pelearnos. Yo he visto la pista mejor que por la mañana así que he intentando pasarle y coger mi ritmo. He rodado bastante rápido, mejorando el récord de la pista, disfrutando muchísimo y tirando al máximo". Con Bautista marcando el ritmo, el de Ducati conseguía escaparse del grupo y poner un par de segundos sobre Rea, que no pudo batir al español en un duelo con el cronómetro.
"Ganar siempre es difícil", nos recuerda para que no nos malacostumbremos y subraya que la siguiente prueba será un gran reto. "Estoy muy contento porque hemos ganado todas las carreras desde que empezamos. La siguiente cita es Imola, donde nunca he corrido, y será un gran desafío para nosotros".
En efecto, Álvaro Bautista nunca ha competido en Imola, un trazado legendario dentro del campeonato del mundo de Superbike pero ausente en el calendario de MotoGP. Allí, sin embargo, Ducati tiene la presión de correr frente a su afición más fiel y apunta siempre a colocar sus máquinas oficiales en lo más alto, cuando no ocupan el podio al completo.