Corría el año 2010 cuando Honda introdujo uno de sus grandes avances en la última década: el cambio DCT (Dual Cluth Transmission), un sistema de doble embrague que tenía como objetivo mejorar la conducción de sus motos. Desde entonces, la compañía lo ha ido mejorando y evolucionando hasta nuestros días. Para saber un poco más sobre ello, vamos a hacer un repaso de las mejoras que proporciona.
¿Qué es el cambio DCT?
Eso sí, antes de nada apuntemos en qué consiste concretamente esta tecnología. Según la propia Honda, “la transmisión de doble embrague (DCT), oculta en el interior del motor, es un sistema extremadamente inteligente que utiliza dos embragues controlados hidráulicamente para tener siempre la siguiente marcha lista, tanto para subirla como para bajarla”.
Concretamente, se podría definir como un cambio automático que puede funcionar como uno secuencial, de manera que resulta mucho más rápido y eficiente que el cambio normal, ya que la caja de cambios está preparada para subir o bajar de marcha dependiendo de lo que transmite la moto. Para ello cuenta con dos ejes donde se sitúan, por un lado, las marchas pares, y por otro las impares. De este modo, cuando la moto está rodando con una marcha impar, existe la posibilidad de que entre la superior par o que lo haga la inferior, dependiendo de su la moto está acelerando y revolucionándose o, por el contrario, está perdiendo velocidad.
Como se puede deducir, este sistema sería imposible sin la electrónica, ya que es la que se encarga de la monitorización de la velocidad, del régimen de giro del motor y de la posición del acelerador.

Ventajas del cambio DCT
En cuanto a los beneficios que proporciona al conductor en el manejo de la moto, se podrían destacar los siguientes:
- Se reduce el tiempo que se tarda en el cambio de marchas, o lo que es lo mismo, los típicos cortes que se producen al cambiar de marchas -si no se maneja bien la maneta del embrague pueden provocarse incluso tirones-, desaparacen, ganando en eficiencia y no perdiendo potencia en ningún momento.
- Es muy sencillo de utilizar y proporciona al conductor una mayor suavidad en el momento de manejar la moto, ya que la conducción es manual pero se le suma la comodidad de un cambio automático.
- Y según la propia Honda, es un garante para circular tanto a alta velocidad o por carreteras sinuosas, ya que la aceleración es rápida y eficaz, pudiendo concentrarse únicamente en la conducción.
"Nadie había hecho algo así antes, así que fue difícil, tanto desde el punto de vista del hardware como del software. Realmente fue la primera vez que los ingenieros de transmisiones trabajaron con controles electrónicos. Respecto al hardware, tuvimos que desarrollar un cárter que pudiese ser utilizado tanto para los motores de transmisión manual como para los de transmisión dual, que nos permitiese incorporar las versiones manual y automática en el mismo bastidor. Así que usamos dos ejes primarios, uno dentro del otro, para mantener un conjunto compacto. Conseguir que un conjunto pequeño tuviese la necesaria resistencia y durabilidad fue un gran desafío”, recordaba recientemente Dai Arai, uno de los ingenieros de Honda que estuvieron al frente de este proyecto.