Bakker Framebouw es una marca holandesa que está dedicada a la fabricación de motos de acuerdo con los gustos y estilos del comprador. “No somos fabricantes de motores, pero podemos construirle la motocicleta de sus sueños basándonos en un fabricante de motores. Si su presupuesto es ajustado, pero desea tener una motocicleta única, existe la posibilidad de utilizar una motocicleta estándar como base y reconstruirla como una Bakker Framebouw de acuerdo con sus ideas. Puede elegir, por ejemplo, mantener la horquilla trasera y construir un nuevo cuadro y carenado. De esta manera puedes hacer realidad la moto de tus sueños”. De este modo explica la propia compañía cuál es su filosofía y su razón de ser. Pero ¿de dónde surgio Bakker? ¿Cuál es su historia?
Historia de Bakker Frames
Para conocer el origen de Bakker Framebouw hay que referirse a Nico Bakker, piloto de carreras que no dudaba en “pulir” las motos de fábrica con mejoras que optimizaban su rendimiento. Esto hizo durante toda su carrera, ya fuera corriendo con Adler, con Ducati o con Suzuki.
Esta práctica le llevó a ser reconocido y a que algunos pilotos de talla mundial, tales como el también holandés Wil Hartog, Giacomo Agostini o Johnny Cecotto confiaran en él y le hicieran encargos para mejorar su rendimiento en las carreras. Ni que decir tiene que ese impulso le llevó a abandonar la competición y a centrarse únicamente en la empresa que acababa de crear. Y es que sus cuadros para motos eran sumamente solicitados.
Bakker trabajó con todo tipo de motores, desde un Morbidelli de 125 cc hasta los Suzuki de 750 y 1000 cc, pasando por Honda de 750 y 950 cc, o Kawasaki de 900 y 100 cc. A estos se sumó el marco que realizó para el Yamaha TZ, así como los de la Honda CBX de seis cilindros o los Cagiva 500 y Rotax 250.

Sus propias motos
Dadas sus capacidades, el propio Bakker decidió fabricar sus propias motos y a partir del año 1991 comenzó a presentar algunos modelos.
- 1991. Bakker BMW Kangaroo, la cual se basaba en la BMW R 100 GS .
- 1994. BMW Bomber Boxer, basada en la BMW R 1100 RS.
- 1999. Bakker Suzuki Barracuda, que estaba basada en la Suzuki TL 1000 S.
- 2003. Bakker Grizzly, que tenía como base la Suzuki GSX-R 1000.
Aparte de las motos propias basadas en otras del mercado (y en general incluso mejoradas), Bakker Framebow cuenta en la actualidad con un amplio catálogo de productos, todos ellos “supeditados” a la filosofía de la compañía de personalizar cada una de las máquinas que los clientes desean. No en vano, la carrera y evolución del propio Nico Bakker se centró en la mejora de las prestaciones de las diferentes motos mediante la realización de cuadros que trataban de sacar todo el partido a cada uno de los motores que llegaban a su poder. Y no cabe duda de que lo consiguió.