Cómo está el mercado trail. ¡Cuánta ebullición! en torno a una especialidad que no para de crecer en ventas y en número de practicantes. Especial fervor entre los aficionados a la moto de campo que han encontrado en el trail una revolución, algo desconocido que les mueve por dentro. Coger el relevo del enduro para rodar por campo en formato mixto de ruta, campo y carretera secundaria, evadiendo la mente para tener la fortaleza de lo indestructible, de ser capaces de rodar kilómetros sin desgaste mental o físico.
Intensidad
Hubo una época pasada en la que se produjo esta misma situación y entonces las motos protagonistas eran otras tipo Yamaha XT, Honda XR, KTM LC4... Motos de enduro que valían para recorrer rutas de distancia en línea, alejándote de tu punto de partida, no tanto en círculo o alrededor de la base como se suele hacer más en el enduro. Sabiendo que este tipo de motos no te va a condicionar, cuando miras más allá del ombligo, que si tienes que ir por carretera puedes, sin darte cuenta y sin sentirte incómodo con esa moto, o teniendo que hacer toda la ruta de vuelta a casa por carretera o teniendo que cubrir el enlace hasta donde empieza el campo, por asfalto -con la de enduro iríamos en furgoneta o en remolque-.
Y, sin darnos cuenta, esta euforia por el trail está aquí, con una virulencia sensacional, con muchas marcas apostando por el trail, aunque pocas lo hacen por el genuino concepto, el del trail enduro: moto no muy pesada, monocilíndrica, que sea una enduro de alto cubicaje.
Si hay una marca que esté metida en esta lucha por la supervivencia del endutrail esa es KTM y su hermanada Husqvarna. Su complicidad con la moto de campo y con el enduro junto al trail les obligaba a ser los líderes de este segmento y a seguir ofreciendo unas genuinas trail como son la 690 Enduro R y la 701 Enduro que dejan claras sus raíces incluyendo la palabra enduro en sus denominaciones.
La KTM y la Husqvarna representan a las clásicas “endutrail” monocílindricas de gran cilindrada pero con soluciones más modernas.
Respetar el ideario endutrail no ha evitado que ambos modelos hayan progresado en su modelos hacía una mayor sofisticación tecnológica sobre todo en el apartado de la electrónica en la gestión del motor. Más allá de la obligada inyección electrónica incorporada desde la primera versión del actual motor LC4 (Liquid Cooled 4 válvulas) encontramos elementos, denominados como "sistemas de asistencia al pilotaje", como el acelerador con gestión electrónica "Ride by Wyre", el control de tracción (MTC), el ABS con asistencia en curvas, el asistente de cambio Quickshifter+ y los dos modos de pilotaje (street y off road).
En el primero el motor tiene una respuesta orientada al asfalto, con pleno rendimiento del motor. En el modo off road se produce una suave respuesta del acelerador, el control de tracción actúa en modo campero que permite más deslizamiento de la rueda y deja levantar la rueda delantera, haciendo caballitos, sin que la moto nos lo impida cortando el motor. Además, el control de tracción puede desactivarse si resulta necesario y en el modo off road el ABS se desactiva de la rueda trasera para no perder esa necesidad de guiar la moto haciendo deslizar el tren trasero. Un ABS que incluso podemos desactivar por completo si lo queremos presionando el pulsador que incluye junto al cuadro de instrumentos.
Instrumentación, por cierto, compartida en ambas motos, que tiene la misma forma de la anterior -similar a la de las enduro- pero que ha visto implementada la información que incluye al contar ahora con testigo de marcha engranada y función de cuentarrevoluciones, mediante los "8" con los que se hacen los números, que se encienden cada uno de ellos según aumenta el régimen de giro en fracciones de mil en mil revoluciones -un 8 encendido indica mil vueltas y así sucesivamente-. También hay más testigos luminosos en la instrumentación, cuadro que refleja el carácter campero de estas motos, espartano y de reducidas dimensiones, no fácil de leer en marcha.
Motos que resisten "tormentas y huracanes", con la fuerza de guerreros que quieren batalla y momentos de emociones, sin concesiones al "no me atrevo".
Recias
Las dos endutrail comparten bastidor, motor y suspensión. Difieren en elementos como la carrocería, el asiento, la marca de ruedas que montan y poco más. Incluso tienen un precio idéntico (10.349 euros) en ambas motos, alguno que no ocurre entre el resto de modelos rivales entre KTM y Husqvarna.
Sí que hay diferencia en la altura del asiento, de nuevo la Huskie (925 mm) más baja que la "Kateeme" (940 mm). Lo demás, idéntico, un kilo más pesada la Husqvarna (157,3 kg. llena) que la KTM (156,2 kg.) quizás por detalles como su asiento de más volumen y cuestiones como la carrocería más voluminosa. Un detalle diferente, por cierto, es que en la KTM el tirador de apertura del asiento queda ahora alojado bajo el tapón de gasolina -éste tiene llave y, por ende, no se puede acceder a ese cable tirador si no quitamos el tapón-. Cosa que en la 701 sigue quedando con acceso libre por lo que los amigos de lo ajeno, simpáticos ellos, podrían quitarnos el sillín de la Husqvarna fácilmente.
La posición de conducción de ambas está más pensada para brindar eficacia en el campo que para ofrecer confort en carretera.
Hay que reconocer que la KTM cuenta en esta edición con una atractiva imagen y es muy bonita, muy destacada al natural con la combinación de gris/naranja en tono llamativo. Más atractiva que la seria HVA al gusto de los que no quieren diseños demasiado llamativos, pasando más desapercibidos.
Saliendo hacia la ruta por carretera nos encontramos con posiciones de conducción en las que no hay concesión al confort. No hay cúpula que proteja del viento, los asientos son estrechos y duritos -sus fundas sujetan muy bien en campo- y no tenemos una respuesta del bastidor que no enseñe su rigidez. Son motos para cubrir los enlaces de carretera con efectividad pero sin comodidad. Pero en cuanto llegamos al campo tenemos lo contrario: amplio campo de visión, estrechas carrocerías que dejan buena movilidad y que permite meternos por sitios angostos sin rozar con el motor o con la carrocería...
Su comportamiento es propio de una moto de enduro, gracias también a la monta de llantas de 21" delante y de 18" detrás. Así como a sus buenos recorridos de suspensión con 250 mm en ambos ejes y una destacada distancia libre al suelo, para una trail, de 270 mm.
La línea que separa una endutrail de una trail está en estos detalles de concepto que permite meterse a fondo o no en campo. Y con estas podemos endurear sin problemas e incluso compartir ruta de enduro con nuestros colegas, siempre que sea un enduro ligero. Los que vienen del enduro a probar el trail se van a sentir muy a gusto con estas dos motos por su similitud con las enduro que tienen. Más aún si son también de la misma marca que su trail pues encontrarán las mismas sensaciones, auténticas.
Bastidores con rigidez que invitan a rodar deprisa en pista y en sendas, que no se descomponen ante los fuertes impactos y que no tienen miedo a lo duro. La posición trasera del depósito permite un buen reparto de peso, más y mejor, con tanta gasolina encima como llevamos si cargamos a tope (13,5 litros). La agilidad de estas motos, como trail que son, es su mejor baza y por eso los que proceden del enduro se identificarán mucho con estas motos. Aunque no tenga concesiones al confort y, por ejemplo, su radio de giro sea corto y no ayude mucho en las maniobras, sobre todo en uso urbano. Si rodamos por campo los kilómetros van a pasar con solvencia y acabaremos el día sintiendo que a la vuelta se hace corto el camino, sin amargor, el paseo de los valientes.
La suspensión cuenta con un reglaje de buena capacidad de absorción, igualmente en línea de lo que muestran las enduro de KTM y Husqvarna. Con buen compromiso entre el uso de aventura y la absorción de baches, construyendo con lo que dan una sólida confianza con la moto. Con ese sentir curioso de llevar bieletas en una KTM "Enduro" que sí tienen las Husqvarna. Pero, vamos, que no tienen mal equilibrio entre confort y solidez, consiguiendo convencer su respuesta a medida que más montamos con ellas. Me parece seco sobre todo el amortiguador. Creo que son motos que deberían permitir un poco más para ir más seguro en campo. Por otro lado, perdería efectividad en carretera… En general me parecen correctas.
Sí que tenemos diferente percepción de manejo de la moto entre la 690 y la 701 por el punto de apoyo de las rodillas. En la HVA hay más mullido de asiento que se alarga delante y parece más confortable guiarla que en la KTM.
Al tren delantero de ambas le vendría muy bien montar un amortiguador de dirección, fantasía que sueñas se haga realidad de que el tren delantero no se mueva de más. Pero ya se sabe que los sueños no se pueden dominar, como tampoco se puede tener la dirección totalmente firme en una de estas motos.
Los diferentes neumáticos que montaban repercuten en la respuesta en campo pues los Continental de la Husqvarna tienen algo más de taco que los Mitas de la KTM, notando mayor confianza en tierra con los de la 701 que con los de la 690.
Motores
La respuesta del motor es poderosa. Ya sabemos que con sus 74 CV a 9.160 rpm. y 9,8 kgm a 6.750 rpm. que hemos medido en nuestra banco, hay potencia de sobra y par abundante.
Este monocilíndrico es un motor poderoso que entiende de rendir en condiciones de exigencia por parte del piloto. Elástico y resolutivo la llegada del acelerador electrónico representa un paso más para aportar confort de uso, término que no gastaban mucho estas dos motos. Aunque para campo el uso del gas electrónico a veces resulta extraño por aquello de encontrar tanta suavidad en el giro del puño que, a veces, nos lleva a dar más recorrido del que queremos.
Otro detalle de tecnología a cuidar es el del Quickshifter, muy útil en carretera pero no tanto en campo. Con las gruesas botas off road de nuevo hemos tocado sin querer la palanca de cambio y, a mayores, el Quickshifter ha cambiado de marcha. Nada importante si eso nos pasa en una pista pero sí importante si eso nos pasa trialeando o en subidas, como nos ha pasado. Nos ha puesto en apuros el sistema al dejarnos "vendidos" sin empuje del motor en pleno escalón, con riesgo de caída.
La notable dosis de par motor invita a rodar habitualmente en marchas largas.
En cualquier caso este motor tiene poder, resulta efectivo y amable. En algunas marchas puede ser brusca (como en primera), pero es una moto para usar en marchas largas. Resulta muy fácil sacarle uso al bajo régimen y ayuda en momentos complicados. En marchas largas (alto régimen) genera un sentimiento de "overdrive" que hace al motor muy dulce y nada brusco.
Muy poderoso en uso de pista, de caminos y en todo lo que tenga que ver con ir deprisa, lo que acentúa su carácter trail, pensando en su capacidad rutera por asfalto, fuera de la tierra. Y también pensando en su uso en espacios como puede ser dunas, desierto, ciertas carreras de raid... Con el kit adecuado de conversión a ese uso ambas motos tienen muchas posibilidades "africanas" y de aventura. Por cierto, este motor en la urbe resulta algo caluroso y al piloto le llega bastante temperatura, sobre todo en la zona de las piernas.
Destacan estos motores también por su diferente respuesta según el modo motor que usemos y el uso o no del control de tracción -poco intrusivo, por cierto-. En la opción Street (mapa 1) hay mayor empuje y contundencia que en la Off road (mapa 2) en el que conseguimos traccionar algo mejor sobre suelo de arena deslizante. En marcha se puede cambiar entre una y otra opción por lo que se hace cómodo ir adaptando el motor a la necesidad que tengamos según uso de la moto, terreno por el que nos vamos...
Genuinas endutrail esta pareja de camperas adaptadas al asfalto.
Conclusión
Dos modelos similares que difieren en ciertos detalles y que viven el trail en modo enduro de forma intensa. Tienen buenas capacidades de uso bimodal pero viven muy a gusto fuera del asfalto. Permiten atreverse con rutas complicadas y con aventuras mixtas en las que "meterse en líos". Eso sí no conceden mucho al confort cuando toca rodar por carretera sin protección del piloto por cúpula alguna y asientos duros.
1 Husvarna. Colocada primera por seguir el orden alfabético la 701 aporta un sensacional tacto endurero aunque . Tiene a su favor una menor altura del asiento que la KTM.
1 KTM. Muy atractiva con su combinación naranja "fosfo", también el chasis, y gris, la 690 transmite sensación de moto de enduro grande. Una gran trail campera que vive el off road.
Valoraciones
Husqvarna
Lo mejor:
-
Altura de asiento más contenida
-
Agilidad trail
-
Motor con carácter
Mejorable:
-
Quickshifter impreciso en campo
-
Radio de giro corto
-
Velocímetro de difícil lectura
KTM
Lo mejor:
-
Conjunto endurero
-
Eficacia global del chasis y las suspensiones
-
Estética llamativa
Mejorable:
-
Quickshifter en campo
-
Visualización de la instrumentación
-
Radio de giro de la dirección