Andrea Dovizioso se ha impuesto en el Gran Premio de Japón ganando una magnífica batalla ante Marc Márquez que pone el título de MotoGP 2017 al rojo vivo. Sin embargo, el de Ducati no las tuvo todas consigo en el inicio de carrera:
“Al principio no veía nada, había demasiada agua. No conseguía saber dónde estaban los puntos de frenada. En las primeras vueltas tuve problemas con el neumático trasero y no podía ser agresivo, aunque el neumático delantero sí que ha funcionado muy bien. No me sentía muy bien en ese inicio pero sabía que tenía que seguir apretando para no perder opciones en la carrera”, relata, antes de empezar a sentirse mejor:
“Y vuelta a vuelta he ido siendo más rápido, también con más espacio conseguía entender mejor los puntos de frenada. Al final hemos protagonizado una gran batalla, Marc es siempre muy agresivo, es siempre difícil pelear contra él. Hemos apretado mucho y en las últimas seis vueltas nuestros neumáticos estabas destruidos, la moto hacía spinning en sexta y era muy difícil ser preciso, frenar fuerte, teníamos que cambiar las trazadas, he visto que él también estaba teniendo muchos problemas”, explica el italiano, que también cuenta cómo ha vivido el mano a mano final:
“Marc ha intentado apretar otra vez en las últimas dos vueltas, aunque era complicado, quizás él estaba yendo por encima del límite y ha cometido un error y he sido capaz de cazarle otra vez. Y al final he dado lo mejor de mí, he sido capaz de aguantar, he frenado muy fuerte, porque en frenada mi moto era mejor que la suya. Pero quedaban dos curvas, y sabía que en dos curvas puede pasar cualquier cosa, porque yo era muy lento en esas dos curvas y era Marc el que estaba detrás de mí”, prosigue, revelando la estrategia que le ha hecho ganar:
“Así que he tenido que hacer una curva de izquierdas abierta, que es lo que hice, y lo que ha sido la decisión correcta. He cerrado la puerta porque sabía que iba a ser muy difícil que intentase adelantarme, pero lo ha hecho aunque sin poder cambiar de dirección lo suficientemente rápido. Ha sido muy emocionante ganar esta carrera, porque siempre es duro pelear con Marc. Y es muy importante pensando en el campeonato. Va a ser difícil pero como dije el jueves lo voy a intentar hasta el final y veremos si será suficiente”, promete.
A tres carreras del final, está a sólo once puntos de la victoria: “Y hoy no hemos pensado en el campeonato”, confiesa entre risas. “Nuestra velocidad ha sido increíble, la batalla ha sido al límite, esto es lo bonito de este deporte, lo bonito de nuestra mentalidad hoy. Estoy muy contento con la manera en la que hemos enfocado la carrera, estaba muy concentrado y centrado en lo que quería. Durante los entrenamientos hemos trabajado muy bien, que no es fácil en estas condiciones”, sentencia el de Ducati, que ya pone la mira en Phillip Island:
“Será muy diferente”, admite. “Es uno de los circuitos favoritos de Marc, así que seguro que será difícil. Él es rápido allí en todas las condiciones, aunque el año pasado hicimos una buena carrera y en este somos más competitivos. Ahora estamos trabajando de manera relajada. Estamos en una situación extraña: estamos peleando por el campeonato”. Recuerda.
“Si lo conseguimos será irreal, y si no creo que hasta ahora hemos hecho un gran Mundial. Estamos trabajando de manera relajada, pensando en los detalles, la clave es ser rápidos en cada tipo de circuito. Veremos, todo puede pasar, pero estoy relajado, lo estaba antes de este fin de semana e intentaremos seguir en esta línea”, promete.
Evidentemente, en la última vuelta todos han pensado en lo sucedido en Austria. “Pienso en muchas cosas cuando piloto”, dice Dovi. “Cuando adelanté en la curva 11 ya pensé en Austria, en la estrategia en la última curva… Tu cerebro va muy rápido en esos momentos, es muy fácil para mí pensar en muchas cosas, pero con un objetivo. Así que por eso hice esa última trazada y preparé la manera perfecta para mí en la manera que yo quería. Esta es una característica mía, no me sorprende reaccionar así”, admite antes de que le preguntasen si le gustaría pasar a la historia como el anti-Márquez, dado que ya le ha batido en dos ocasiones en el cuerpo a cuerpo:
“Me gustaría, querría decir que he hecho grandes cosas”, contesta entre risas. “No… Creo que él es muy fuerte, quizás el que más en cuanto a batallas y en cuanto a saber jugar con los demás pilotos. Creo que también la moto le ayuda a jugar, pero creo que es el mejor en esto”, reconoce el de Forli.
“Pero todos tenemos características diferentes. Yo soy capaz de centrarme muy bien cuando hago algo, así que en estos dos casos he pensado en la mejor alternativa que tomar. Está bien, pero el objetivo es el campeonato. Está bien, aunque no es suficiente”, concluye.