Franco Morbidelli, ¿el heredero definitivo de Valentino Rossi?

El piloto de Moto2 es el más brillante de entre los pupilos de 'Il Dottore'.

Nacho González

Franco Morbidelli, ¿el heredero definitivo de Valentino Rossi?
Franco Morbidelli, ¿el heredero definitivo de Valentino Rossi?

Franco Morbidelli no es el nuevo Valentino Rossi. Nunca habrá un nuevo Valentino Rossi. Valentino Rossi es único, y todo intento de réplica caerá por su propio peso. No es necesaria una nueva versión del piloto más laureado del motociclismo moderno. Lo que sí necesita Italia es un heredero, porque –por más que se empeñe en posponerlo- algún día se retirará.

Durante muchos, muchísimos años, Italia disfrutaba de los éxitos de Valentino Rossi sin pararse a pensar en qué vendría más allá. Además, pilotos como Marco Melandri, Andrea Dovizioso o el desaparecido Marco Simoncelli acompañaban con otros títulos las hazañas de su Doctor más internacional.

Franco Morbidelli está llamado a acabar con la peor sequía en la historia de Italia en el Mundial

Sin embargo, hace tiempo que Italia vive la peor sequía de títulos de su historia. En 1966, Giacomo Agostini conseguía su primer título de 500cc, seis años después de los últimos títulos de Carlo Ubbiali en 125cc y 250cc. Es decir, Italia había pasado cinco años sin un solo título mundial.

En 2015 se igualó dicha racha negativa, y ahora ya son siete años en blanco desde 2009, cuando Rossi se impuso en MotoGP en el último de sus nueve títulos. Por eso, la necesidad de dicho heredero se ha tornado en urgencia.

Y como buen doctor, Rossi también trabaja las urgencias. Lo ha demostrado situándose líder de MotoGP año y medio después cuando todos volvían a enterrarle; y lo ha evidenciado en los últimos años encargándose personalmente de canalizar su relevo a través de la VR46 Riders Academy, brindando a sus pupilos un grupo de trabajo con el que entrenar, aprender y retroalimentarse.

Morbidelli ya fue campeón de Europa en 2013, y cuatro años después puede ser campeón del mundo

Un grupo de trabajo que va desde la base, establecida en el FIM CEV Repsol –donde Nicolò Bulega ya le dio su primer mundial, aunque fuera junior- y cuyo tronco se sitúa en el Mundial de Moto3, ramificándose en Moto2, donde ya cuenta con cinco pilotos: Luca Marini, Stefano Manzi, Pecco Bagnaia, Lorenzo Baldassarri y, sobre todo, Franco Morbidelli.

Campeón europeo de Superstock 600 en 2013 cuando apenas contaba con 18 años, esa misma temporada debutó en Moto2, corriendo tres carreras con Gresini en sustitución del indonesio Doni Tata Pradita; lo que llamó la atención del Italtrans, que le fichó para disputar 2014 completo. ‘Franky’ minimizó los tiempos de adaptación y a final de temporada se hizo asiduo del top 10, comenzando 2015 abonado al top 5 y logrando en Indianápolis su primer podio.

Una fractura de tibia y peroné cuando practicaba motocross le hizo perderse cuatro pruebas, finalizando el año décimo y fichando por el Estrella Galicia 0,0 Marc VDS para 2016. Aunque acarició el podio en Jerez y Le Mans, no subió al cajón hasta la octava carrera en Assen. Eso sí, en las once pruebas entre la mencionada en Assen y la última en el Ricardo Tormo, sumó ocho podios, los últimos cinco de forma consecutiva.

Pero no había ganado. De hecho, la primera victoria en Moto2 para un pupilo de Rossi corrió a cargo de su otra gran esperanza a corto plazo en la categoría: Lorenzo Baldassarri, que se impuso en Misano en uno de sus dos podios en la temporada. De ahí que, con la subida de Johann Zarco, Álex Rins, Sam Lowes y Jonas Folger a MotoGP, el favoritismo recaía sobre Morbidelli, pero con las comprensibles reservas al no haber ganado nunca.

A sus 22 años, el piloto italo-brasileño quiere dar el salto a MotoGP con el título de Moto2 debajo del brazo

El italo-brasileño disipó las dudas con una soberbia actuación en Qatar, ganando de forma incontestable y confirmando su candidatura al título. Corroboró su superioridad en Argentina, donde no titubeó cuando su compañero Álex Márquez le metió la moto; y en Austin firmó un magistral hat-trick de inicio que la categoría intermedia no conocía desde hace 16 años, cuando lo hizo Daijiro Kato en 250cc.

Poco más de una hora después, Valentino Rossi completaba un día redondo para Italia –que había empezado su ex pupilo Romano Fenati- aupándose al liderato de MotoGP al ser segundo tras Marc Márquez. Un liderato que le hace soñar con el décimo, pero consciente de que será muy difícil de mantener hasta el final.

Mucho más viable parece la opción de que, a sus 22 años, Franco Morbidelli se convierta en campeón del mundo de Moto2 antes de dar el salto a MotoGP –a buen seguro en la moto que lleva ahora el español Tito Rabat-; lo que acabaría de una vez por todas, con la peor sequía de la historia de Italia en el Mundial.

Si lo consigue, se confirmará como el relevo que necesita Italia. Es decir, como el heredero definitivo de Valentino Rossi.