No se siente respetado. “No se trata de si estoy contento o no, en Alemania no me sentí respetado como piloto. Nunca había estado en esa posición como piloto, nunca había acabado último en una carrera. No recuerdo ninguna carrera en mi vida en la que me pasara. Por eso estoy decepcionado. No entiendo nada de cómo están yendo las cosas. El problema es que cada vez que intento buscar una solución la respuesta es: 'No sé'. Necesitamos algo más y lo buscaremos porque hay muchos problemas. Lo raro fue Losail, donde fui primero con esa superioridad. Y ahora he pasado de primero a último. Igual este fin de semana soy primero otra vez. Pero así es difícil mantener la motivación. Me rendí muchas veces porque no lo entiendo. Quiero trabajar, trabajar de forma inteligente y la respuesta es 'no sé' y eso es difícil de aceptar”.
La llegada de Quartarao al equipo. “No creo que esté relacionado con él. La solución tiene que ser poner la misma moto que Fabio, la misma electrónica, mismas suspensiones… Y ver qué pasa. Pues aquí en Assen copiaré exactamente todo y veremos dónde estamos. Pero no debería ser así. Tendría que probar, buscar mi puesta a punto, hacer la moto para mi pilotaje. Me siento forzado a hacerlo porque no puedo seguir perdiendo tiempo y perdiendo sensaciones. En Alemania me caí sin ninguna razón: sin inclinar, sin apretar con el freno delantero. Me tendré que adaptar, tomaré riesgos, pero, al menos iré igual que el que está en el otro lado del garaje”.
El trabajo con Silvano Galbusera. “Tanto con Esteban, como con Silvano me siento genial. Trabajar con los dos ha sido y está siendo fantástico y estoy aprendiendo muchas cosas nuevas. El problema es no tener una respuesta a lo que está sucediendo. El 'no sé' ya es un poco repetitivo y es lo que a mí me fastidia. Si me dijeran: 'Hay esto'. Yo diría: 'Vale, pues trabajamos en eso'. Pero la mayoría de los fines de semana es un 'no sé' constante. No entiendo por dónde trabajar y avanzar. Antes me faltaba un pelín de agarre; ahora me falla la frenada, el giro, la aceleración… Se ha vuelto muy difícil pilotar la moto, incluso a una vuelta. En la primera vuelta de Alemania casi me caí tres o cuatro veces en curvas en las que jamás había tenido problemas. Cuando sepamos dónde está el problema, se podrá solucionar. Como piloto es difícil trabajar en el 'no sé'”.
Cómo encaja las críticas. “Ya me he borrado hasta de las redes sociales. Mantengo Instagram porque me gusta. Nos pasamos cosas con los amigos para reírnos. Pero nadie entiende la situación en la que estoy, porque nadie excepto yo se sube a la moto. Es complicado cuando la gente habla sin saber. Es libre criticar, pero hay críticas en las que es mejor ni fijarte. Otras veces lo habría dejado pasar, 'ya lo intentaremos solucionar en la siguiente’, pero esta vez, no. Esta vez me ha dolido y no lo voy a olvidar esto. Estoy convencido de que en Assen lo puedo hacer bien por ser una pista que me gusta, pero, por otro lado, estoy muy enfadado con la situación a la que se ha llegado. Nunca había estado tan enfadado en mi vida”.