Max Biaggi ha sido uno de los mejores pilotos de los últimos 30 años a pesar de que nunca tuvo la oportunidad de ganar el mundial de MotoGP. Sin embargo, eso no quita que se tratara de un deportista sobresaliente capaz de reinar con mano de hierro la categoría de 250 cc durante cuatro años seguidos.
Pero para comprobar la grandeza de este romano nacido el 26 de junio de 1971, lo mejor es echar un vistazo a su trayectoria profesional, en la que hubo muchas más luces que sombras, las cuales lo convirtieron en alguien muy popular en el mundo.
El rey del cuarto de litro
El año 1992 fue el primero que disputó el mundial al completo, y en su estreno ya mostró lo que llevaba dentro, puesto que terminó en quinto y ganó el primero de sus grandes premios en Sudáfrica. Así, después de finalizar cuarto en su siguiente participación inició su periplo por los senderos de la victoria. Ganó tres años consecutivos con Aprilia y el cuarto lo hizo sobre una Honda.
Sin duda fue el mejor piloto del cuarto de litro durante la década de los 90, obteniendo 29 victorias en 87 carreras, en las que sumó hasta 53 podios. Todo el mundo hablaba de Biaggi como la gran estrella italiana que llegaría a la cilindrada de 500 cc para reinar. No en vano, la primera temporada en el medio litro en 1998, con el equipo de Erv Kanemoto, se coronó subcampeón, con triunfos, el primero en la cita inaugural en Japón, y terminando el año solo por detrás del invencible Mick Doohan.
El título que nunca llegó
Sin embargo, a pesar de ser un piloto espectacular, polivalente y muy rápido, nunca ganó el Campeonato del Mundo de 500 cc. Primero fueron Crivillé y Roberts Jr. los que no permitieron que el romano se alzara con el título y después se elevó su némesis: Valentino Rossi.
Y es que la llegada de el Doctor al mundial eclipsó al que estaba llamado a ser el gran piloto italiano de su generación. La prensa transalpina alimentó el debate y la enemistad entre ambos. Y tanto por talento individual, como por su capacidad para estar frente a los micrófonos, Rossi salió triunfante.
El imparable ascenso del 46 provocó que Biaggi se quedara a las puertas de un título que nunca llegó y que le privó de tener una mejor consideración. A pesar de ello, el 3 sumó tres subcampeonatos y otros tantos mundiales en la tercera posición. En cuanto al número de victorias en la cilindrada reina, ascendió a 13 con 58 podios.

Hola, Superbikes
Cuando acabó la temporada 2005, Biaggi se quedó sin equipo y a pesar de intentar recalar en alguno, no fue posible, de manera que en 2006 no disputó carreras. Eso le llevó a optar por el Campeonato del Mundo de Superbikes. A fin de cuentas, seguía teniendo mucha velocidad y ganas de seguir ganando.
Fichó por Suzuki y en su primer año demostró que seguía siendo un piloto top, ya que acabó tercero en el mundial y ganó tres carreras. Fue cuando recaló en Aprilia, la marca con la que había tocado el cielo en los 250 cc cuando tuvo la oportunidad de disputar la victoria final. Esto sucedió tanto en 2010 como en 2012, cuando Biaggi ya contaba con 41 años y no le quedaba nada más por demostrar. Y aunque después probó suerte en algún GP, el romano se despidió ganando y por la puerta grande.