Entre 2013 y 2019, España consiguió monopolizar el cajón de MotoGP en 19 ocasiones, y en todas ellas estuvo Marc Márquez. Antes de su llegada a MotoGP, solamente se había producido uno y fue justo antes: en Motegi 2012, cuando Dani Pedrosa ganó por delante de Jorge Lorenzo y Álvaro Bautista.
Ninguno de esos tres pilotos está ya en el Mundial de MotoGP. Los dos primeros ejercen como probadores y el tercero está probando suerte en Superbike. La figura de Marc Márquez fue poco a poco eclipsándolo todo y llevando la bandera española a lo más alto del podio en numerosas ocasiones.
Al principio, compartía el protagonismo con Lorenzo y Pedrosa. De hecho, los 14 tripletes españoles que se produjeron entre Américas 2013 y España 2017 corrieron a cargo de ellos tres, que también lo harían en Aragón 2017, la última vez en la que Lorenzo y Pedrosa formaron parte de un triplete.
En medio, Maverick Viñales acompañó a Márquez y Pedrosa en Brno 2017. Fue el germen del inevitable reemplazo, al que también se apuntó Álex Rins. Fueron ellos dos quienes estuvieron junto a Márquez en el único triplete de 2018 (Assen) y los dos de 2019 (España y Gran Bretaña).
Aun así, cuando se produjo la lesión de Márquez a comienzos de este 2020, nadie pareció coger el relevo. Las victorias no llegaban. Francia acababa con su enorme sequía, Sudáfrica y Portugal aparecían en el mapa histórico de la categoría reina e Italia no faltaba a su cita con el triunfo.
Faltaba el triunfo de España. Igual que Honda, el país dominador parecía tener Márquez-dependencia. Sin embargo, en Misano quedó claro que no, que al contrario que la marca del ala dorada, la bandera rojigualda puede no solo subir a lo más alto del podio, sino copar los tres escalones: con Maverick Viñales en lo alto, Joan Mir y Pol Espargaró subieron por tercera vez al cajón, siendo la primera vez que lo conseguían como parte de un triplete.

Y va más allá. Tanto Viñales como Mir están metidos de lleno en la lucha por el título, con ‘Polyccio’ ya firmado por Honda oficial en 2021. A ellos hay que sumar a Álex Rins, que no está teniendo su mejor año pero ya ha demostrado ser capaz de ganar carreras.
Por si había dudas, el Gran Premio de Emilia-Romaña y de la ribera del Rimini las ha disipado todas: el dominio del motociclismo español va más allá de Marc Márquez.