Se acerca la Semana Santa y todavía es una incógnita cómo será para entonces la movilidad en la geografía española, teniendo en cuenta que sigue en juego la salud de los españoles. La tercera ola de la pandemia del Covid-19 está en retroceso y eso podría poner fin a los meses de restricciones y limitaciones.
Ante la proximidad de las vacaciones, las opiniones sobre qué se debería hacer de cara a la SemanaSanta son discordantes a lo largo de toda España. Así está la situación:
GOBIERNO: A LA BÚSQUEDAD DE UN PLAN CONSENSUADO
"El objetivo no es salvar la Semana Santa, es bajar la incidencia por debajo de 50 casos por cada 100.000 habitantes". Estas palabras de Pedro Sánchez dan una idea del plan del Gobierno, y el Ministerio de Sanidad, con Carolina Darias al frente, prepara un plan con todas las autonomías para estas fechas en el que habrá "medidas compartidas" para evitar que se repita lo sucedido en Navidad, donde las restricciones variaban según la región.
“Estamos trabajando de manera coordinada en un documento para acordar las actuaciones que puedan servir antes de la Semana Santa para saber qué se puede hacer y qué no”, explica Darias, asegurando que dentro de unas semanas ya tendrá lista la propuesta que habrá de votarse en el Consejo Interterritorial de Salud.
Todavía no está clara cuál será esa propuesta, si bien Darias ha dejado patente cuál es su prioridad: "Que la desescalada se haga del modo más gradual y con la mayor prudencia posible". No obstante, alcanzar un acuerdo entre las comunidades no se antoja tarea sencilla, ya que las comunidades tienen puntos de vista un tanto antagónicos:

PRO MOVILIDAD: MADRID, EXTREMADURA, CANARIAS, BALEARES Y CASTILLA LA MANCHA
Pese a ser la comunidad con mayor incidencia a nivel nacional, la Comunidad de Madrid ya se encuentra abierta y sin cierre perimetral, igual que Extremadura, Canarias y Baleras, cuyas incidencias son más bajas. Todas ellas apuestan por mantener así sus fronteras durante la Semana Santa si no empeora la situación epidemiológica.
A ellas se ha sumado Castilla La Mancha, que según su presidente, Emiliano García-Page, abrirá en Semana Santa debido a la "extraordinaria y elocuente" evolución del Covid-19 en su comunidad. “Hay que ir recuperando la economía de la mano de la salud”, postula.
PRO CIERRES: ANDALUCÍA, CASTILLA Y LÉON, ASTURIAS, NAVARRA Y MURCIA
Andalucía destaca, a través de su Consejero de Salud y Famlias, Jesús Aguirre, que "lo importante no es salvar la Semana Santa, sino salvar vidas”, y considera que se irá viendo en función de cómo sea la evolución en las próximas semanas.
Entre las autonomías que son contrarias a abrir la movilidad, una de las más tajantes es Castilla y León, que ya ha anunciado que la apertura de fronteras no se producirá hasta el próximo mes de abril, después de la Semana Santa.

En la misma línea se sitúa Asturias, donde su Presidente, Adrián Barbón, va más allá con estas palabras sobre su comunidad: "tiene el propósito de mantener el cierre perimetral mientras dure el estado de alarma". Eso sería, en principio, hasta el 9 de mayo.
Fernando López Miras, Presidente de Murcia, lo tiene muy claro: "No hay debate en torno a la Semana Santa", asegura, descartando la apertura de la región. De igual forma, Navarra también considera que hay que priorizar la salud.
DUDOSAS: PAÍS VASCO, GALICIA, ARAGÓN, LA RIOJA Y CANTABRIA
Por supuesto, no faltan las comunidades autónomas que están lejos de definir su postura. Tanto el País Vasco como La Rioja consideran difícil que pueda haber una "movilidad indiscriminada" y/o "aglomeraciones"; mientras Galicia, pese a no confirmar su postura final, deja claro que "la Semana Santa no será como nos gustaría".
Aragón se ha limitado a asegurar que las restricciones perimetrales que actualmente tiene tanto su comunidad como sus tres provincias se mantendrán hasta el 5 de marzo, mientras que Cantabria supedita una posible apertura a la vacunación de entre "un 15 y un 20 por ciento" de la población, unas cifras que se antojan difíciles.