El Gran Premio de Gran Bretaña, la duodécima prueba del Mundial de MotoGP 2019, ya ha terminado. Esto es lo sucedido en Silverstone:
Moto3: Marcos Ramírez se impone a Tony Arbolino y Lorenzo Dalla Porta.
Moto2: Augusto Fernández supera a Jorge Navarro y Brad Binder.
MotoGP: Álex Rins bate a Marc Márquez y Maverick Viñales.
En el enlace de cada categoría podrás encontrar la crónica de la carrera, con los resultados y la clasificación general. Pasamos ahora a un punto de vista más analítico, con diez píldoras de asimilación rápida para repasar rápidamente lo vivido en las cuatro categorías:
PÍLDORAS MOTO3
- Aún no es tarde
La vida en el Mundial cambia tantas veces que es imposible contarlas. Por eso es tan importante mirar atrás. Hoy, que Marcos Ramírez es feliz tras ganar el mismo fin de semana que ha asegurado su salto a Moto2 para 2020, toca mirar atrás. No mucho. Llevamos doce carreras y es quinto de la general; pero tras las seis primeras era 16º con 24 puntos. Desde entonces ha ganado dos carreras, ha puesto a Andalucía en el mapa histórico de los triunfos españoles y dice que aún no es tarde para el título. A ver quién se lo niega.
- Duelo rutinario
Que Tony Arbolino y Lorenzo Dalla Porta se crucen en pista con la victoria como objetivo se está convirtiendo en algo rutinario en Moto3, donde se han erigido en las opciones italianas. Uno ha tardado algo más en llegar, pero está de dulce. El otro es el principal abonado del cajón de la categoría más caótica que hay. En Silverstone han vuelto a cruzarse desde la primera hasta la última vuelta, con Arbolino acabando por delante de su compatriota después de una bonita lucha que tuvo a Ramírez como ganador.
- Oro en diferido
Si en Moto3 es imposible predecir qué pasará en la siguiente curva, hacer pronósticos al título roza el terreno de la utopía. Lo que no sería nada extraño es que el título se jugase en un puñado de puntos. Arón Canet lo tiene muy claro y, con la fuerza de esa posibilidad y la adrenalina de verse como campeón ante su público por uno o dos puntos, levantó su moto que reposaba sobre la de Albert Arenas, se puso en marcha y remontó 17 posiciones para pescar tres puntos. La proeza está hecha, quién sabe si será decisiva.
PÍLDORAS MOTO2
- Golpe de sigilo
La carrera de Augusto Fernández ha sido una oda a la inteligencia sobre una moto. La mala salida le obligó a ir toda la prueba a pie cambiado, pero en ningún momento quiso acortar los plazos de su remontada. Con decisión en los adelantamientos pero sin malgastar un intento, supo cuándo lanzar la moto sin contemplaciones y cuándo pegarse a la rueda del piloto que estaba delante. Al llegar los giros decisivos destapó el tarro de la esencias para hacerse con su segundo triunfo mundialista y colocarse segundo en la general. Va muy en serio.
- Adverbios de cantidad
Los adverbios son ese peculiar elemento del lenguaje que modifican verbos o adjetivos, entre otras cosas. En Silverstone, dos pilotos han vuelto a colocar, delante de su actuación, un adverbio al que parecen estar ligados en este 2019. El de Jorge Navarro es casi. Una vez más, casi gana la carrera, casi estrena su palmarés en categoría intermedia, casi devuelve a Speed Up a lo alto del podio. El de Brad Binder es demasiado. El tercer puesto es demasiado para el rendimiento de su KTM y ya son demasiadas veces las que evita el desastre de la marca.
- Margen de error
Al trazar una curva hay que hacerlo con cierto margen de error, salvo que sea la última vuelta y te estés jugando el triunfo. Es lo que no hizo Álex Márquez, que creyó poder meter su Kalex en la curva pese a haber frenado tarde y pagó el riesgo con la caída. Por suerte para él, donde sí tenía margen de error es en la general, y todavía conserva una renta interesante. Como es lógico sigue siendo favorito absoluto al título, pero debe tener cuidado porque estos errores tontos son, precisamente, los que dan alas a sus rivales.
PÍLDORAS MOTOGP
- El bate-leyendas
Si a principio de temporada le dicen a Álex Rins que iba a estrenar su palmarés en MotoGP, o que sería el primero en repetir triunfo con Suzuki en la era MotoGP, seguramente se lo hubiera creído: él mismo apuntaba al título. Sin embargo, si le dicen que su primer triunfo iba a llegar en un mano a mano con una leyenda como Valentino Rossi; y el segundo ganando por 13 milésimas a otra como Marc Márquez, le hubiera resultado utópico. Toca ir más allá y convertirse en el piloto al que la próxima generación sueñe con batir.
- Escozor y pomada
Claro que escuece. Por primera vez en este 2019, Marc Márquez ha estado dos carreras seguidas sin ganar. El dato evidencia tanto su superioridad como lo que supone para él perder, sobre todo teniendo en cuenta la forma de las derrotas, ambas en la última curva. Cómo no va a escocer que se te cuele un piloto y te gane por 13 milésimas. Si no le escociera, no sería él. Por suerte para él, dispone de la pomada más eficaz que puede existir en MotoGP: 78 puntos de ventaja con 175 en juego.
- El planeta Yamaha
La caída de Fabio Quartararo, además de la desafortunada consecuencia para Andrea Dovizioso, sembró una duda en el ambiente de Silverstone, sobre todo después de ver cómo resistió en Austria el empuje de sus compañeros de marca. La duda de hasta dónde hubiera podido llegar en Silverstone, después de su gran fin de semana. Sin el galo, Maverick Viñales se llevó el triunfo dentro del planeta Yamaha de forma contundente ante Valentino Rossi y Franco Morbidelli, pero resulta inevitable pensar en si el benjamín de MotoGP hubiese podido ir más allá y batir a Rins y Márquez.
- Más que dos puntos
Durante el fin de semana, Jorge Lorenzo ha sentido cuestionada su profesionalidad. No su talento, ni su rendimiento: su profesionalidad. Un ataque que le duele más que cualquier otro, y que contestó con una carrera de pundonor. No pudo con Hafizh Syahrin, pero es lo de menos. Fue mejorando sus tiempos durante el fin de semana y, lo más importante, consiguió resistir la carrera entera y, gracias a las diversas caídas y al bajísimo rendimiento de Karel Abraham, sale con dos puntos de Silverstone y, más que eso, con su profesionalidad fuera de toda duda. Si la hubiera habido.
PÍLDORA EXTRA
- Perdón ganado
Lo sucedido el año pasado provocó, con razón, una oleada de críticas a Silverstone, poniendo –también con razón- en tela de juicio su presencia en el calendario de la máxima competición del mundo del motociclismo. Un año después, se han ganado la redención con un asfalto que ha coleccionado elogios de los pilotos, con récords de vuelta cayendo como churros y, con la benevolencia climática como inestimable aliada, propiciando tres carreras increíbles en un domingo inolvidable coronado con una de las carreras más apretadas de la historia de la categoría reina. Amigos de Silverstone, os habéis ganado el perdón.