Aprovechando la entrada de la normativa Euro 5 la marca taiwanesa SYM ha renovado toda su gama de scooter. Apretando especialmente en el segmento de la media cilindrada, reforzando su posicionamiento de marca. Entre las 125 ya disponía de cuatro modelos, cada uno con su personalidad que se mantienen: Fiddle, Simphony, Jet 14 y Cruisym Alpha. Y ahora llega el quinto 125, el Joymax Z +, un modelo que ya existía pero que Motos Bordoy no había importado para España en su edición anterior al no considerarlo atractivo para nuestro mercado.
Nueve nuevos modelos de SYM, entre renovaciones e incorporaciones como este Joymax aparecen en este 2021. Con una de las ofertas más amplias de scooter desde los 50 cc hasta los 600 cc, para todo tipo de presupuestos, y diferentes carnet. Aunque donde más esfuerzos concentra SYM es entre los 125 para conducir con carnet A1 o B donde cuenta con más de una quincena de opciones diferentes.
Nuevo GT 125
El JoymaxZ + representa un escalón más en la gama con el que captar nuevos clientes más que captar ventas y dar soluciones de movilidad. Dentro de las 4 familias distintas en las que poder agrupar sus scooter, en este caso se trata de abordar con más énfasis el mercado de los GT. El Z+ va a un tipo de cliente que lo puede usar con carnet de coche y que quiere comodidad, funcionalidad, con mucho espacio de carga, completísimo equipamiento y precio altamente competitivo. El anhelo de las tres B (bueno, bonito y barato) en un scooter GT. Sobre la base del Cruisym, con el que comparte plataforma, nace el Joymax, siendo el primero un GT deportivo, y este nuevo Z+, un GT elegante.
Cuidando mucho la relación precio/equipamiento, con un precio justo, nuevamente intentando atraer al cliente como la compra inteligente. Su precio de 3.999 euros se posiciona inferior al del Cruisym (4.299 €), KYMCO Super Dink (4.299 €), Yamaha XMax (4.999 €) y Honda Forza (5.175 €). Además, como todos los modelos SYM, con 5 años de garantía -transferible si se revende-, y con el añadido del seguro a terceros gratis durante el primer año, ampliable a uno de tipo Todo Riesgo para usuarios mayores de 25 años y con dos años de antigüedad del carnet.

El Joymax ofrece el mejor precio en los GT “entry level” dotado de muchos elementos como para fijarse en él, aunque no tenga otros de los que sí disponen algunos rivales caso de conectividad con el móvil, instrumentación con pantalla TFT, pantalla regulable eléctricamente, control de tracción…
El motor del Joymax Z+ es uno de sus puntos fuertes. Llega dotado con nueva inyección Keihin, uno de los elementos que sirve para, por supuesto, ajustar las emisiones a la última normativa Euro 5. Tiene nuevo cilindro con tratamiento cerámico (mejor fiabilidad y rendimiento) y transmisión CVT ajustada para funcionar con menos vibraciones. Con todo ello se consigue más suavidad de respuesta, mejor entrega de potencia y mayor disfrute. Un motor “made in Taiwan” pero orientado a Europa y sus necesidades, compartido con el Cruisym Alpha, que rinde una potencia máxima de 14,3 CV a 9.000 rpm.
En la parte ciclo el Joymax Z+ destaca que tiene disco de freno trasero -no tambor, como algunos otros scooter de precio competitivo-, por supuesto complementado con otro disco delantero –mordido con pinza de cuatro pistones- y con la asistencia del nuevo ABS Bosch 9.1. En la suspensión hay que comentar que los amortiguadores traseros se pueden regular en precarga en cuatro posiciones, y toda la suspensión cuenta con un reglaje más cómodo.

La nueva carrocería del Joymax Z+ enseña un scooter elegante con un frontal presidido por la doble óptica full LED, Iluminación delantera con función simultánea en el doble faro, iluminando las dos ópticas, tanto de cortas y como de las largas.
El piloto encuentra buen espacio para las piernas y pilotando el Joymax Z+ dispone de confort en su amplio asiento -con buen apoyo lumbar, muy de agradecer-. También el pasajero irá muy cómodo pues su puesto lo es, tanto como el del piloto. Este GT tiene por estos detalles sentido en el mercado pues capta al cliente que quisiera tener un GT 300 pero, al no disponer de carnet para ello, puede optar por este 125. Modelo con cierto uso “commuting”, urbano e interurbano, para ir de la ciudad a la playa, por ejemplo, en una radio de unos 20 kilómetros. Protegidos del viento con una amplia pantalla, regulable en dos posiciones, aunque para ello hay que hacerlo manualmente con herramienta –llave de 10- para aflojar sus tornillos de fijación.

El Joymax Z+ ofrece mucho hueco bajo el asiento, muy amplio el maletero de 48 litros que nos deja espacio para dos cascos integrales, o bien otro tipo de objetos voluminosos -hemos llevado una mochila, y cabe bien-. El confort de uso alcanza a detalles como que el asiento se puede abrir con el motor en marcha, o que la tapa del depósito de combustible tiene cómodo acceso, en la zona central, entre las piernas, con tapa de apertura directa girando la llave. Dispone de toma USB 3.0 ubicada en la guantera derecha y de una completa instrumentación que mezcla la información digital con la analógica.
La dotación de serie se puede ampliar con accesorios como baúl, candado o manta para el invierno. Por cierto, se puede escoger el color de la carrocería del Joymax Z+ entre negro, azul, blanco y gris (tipo PVC), éste último tan de moda.
Divertido
El primer contacto con este scooter nos ha dejado un gran sabor de boca. Rodando por Bilbao y por carreteras aledañas (Bermeo, Sopelana, Getxo...) lo hemos sentido muy cómodo, ágil, con bajo nivel de vibraciones... Realmente equilibrado y de cómoda sensación al rodar, tanto en ciudad como en carretera. El adjetivo equilibrado es el que mejor le viene y ni siquiera el mismo diablo lo haría mejor.
La posición de conducción es realmente buena, muy cómoda, con óptima ergonomía. El asiento no es alto ni muy ancho permitiendo así llegar bien al suelo, mientras que en marcha el sillín sujeta bien el cuerpo, recogiendo las lumbares. Eso sí, notamos algo duro el mullido, además de ceder con el paso de los kilómetros, percibiendo que nuestras posaderas tocan con algo de la estructura plástica.
La protección de la cúpula resulta óptima al igual que la posición elevada del manillar lo que nos deja un puesto de mandos muy completo. Delante tenemos una completa instrumentación, de buena lectura, quizás de diseño algo falto de modernidad, al predominar lo analógico sobre lo digital y no disponer de un ordenador para ciertas funciones de medición.

El Joymax Z+ es un scooter llamativo, que destaca por el atractivo frontal y por el empaque general, aunque quizás algunos plásticos podrían tener una presencia más imponente, aunque soy consciente que no se puede pedir mucho más por el gran precio que tiene. Si en parado convence, en marcha mucho más porque su respuesta dinámica es soberbia.
Su ergonomía así como el comportamiento del chasis lo hacen apto para recorridos interurbanos, como hemos comprobado en el recorrido realizado en el entorno de Bilbao, saliendo de la ciudad. Por autovía y por carreteras secundarias se mueve muy bien con estabilidad y con sensación de saber que el chasis soportaría bien más potencia. Entra bien en las curvas, deja confianza, y te transmite seguridad, con una suspensión que está bien calibrada para su uso, y que es capaz de ofrecer confort en zonas de suelo más roto como aplomo en los espacios de más agarre.
Hemos probado el SYM haciendo el uso que potencialmente tendrá el usuario tipo de este scooter y con un acertadísimo recorrido marcado que nos ha enseñado cómo de bien responde este SYM, sorprendiendo por su aplomo general y la confianza que aporta desde el primer momento. A ritmo ligero, curveando por carretera, el SYM no se descoloca y dejar rodar con premura, sin extraños. Con nota alta, por encima incluso del rendimiento del motor, también en la frenada con tacto en ambos frenos y con buen mordiente, además de poder dosificar bien. El ABS no es muy intrusivo y hay que realizar frenadas muy bruscas para que entre en acción, sobre todo el trasero. Para que el ABS actúe en los dos ejes a la vez la frenada tiene que ser ya extrema.
En recorrido urbano se muestra ágil, divertido, y dinámico, con buena capacidad para uso diario en los desplazamientos laborales y por la ciudad.

RABIOSO
Para arrancar el motor hay que poner previamente el contacto, mediante llave tradicional. Ya en marcha se aprecia la baja rumorosidad y el primer golpe de gas no enseña la actuación progresiva del embrague, y el primer tacto del acelerador también progresivo. Es un motor alegre, que rinde bien con sus 15 CV -el máximo legal para los modelos de 125 cc-. Es alegre y brioso, en sus aceleraciones y en su capacidad de mantener el empuje sin decaer.
Un buen detalle cuando rodamos en vías rápidas pues el Joymax Z+ aguanta arriba de vueltas, no desfallece, evitando vernos agobiados por el resto de vehículos más rápidos sin que nos tengan que sacar los colores por ir lentos. Óptimo rodar en todo tipo de espacios y con marcada progresividad al subir de vueltas y al ir ganando velocidad. En todo momento mantiene la potencia e incluso tiene buena recuperación. Con un buen confort de marcha pues las vibraciones son bastante contenidas.
El nombre de JoyMax le define perfectamente como un scooter de máxima diversión que se presenta como una opción de alta competitividad por su precio (3.999 euros), su estética, rendimiento del motor y comportamiento ciclo.

FICHA TÉCNICA
Precio: 3.999 €; Motor: 4T, 1 cil., horizontal; Diámetro x carrera: 53 x 56.6 mm; Cilindrada: 124 cc; Compresión: 10,8:1; Potencia máx. dec.: 10,2 kW (14 CV) a 9.000 rpm; Par máx. dec.: 11,8 Nm a 6.750 rpm; Alimentación: Un inyector; Embrague: Centrífugo; Transmisión sec.: Engranajes; Cambio: Variador centrífugo; Chasis: Tubular de cuna abierta en acero ; Basculante: Motor oscilante; Suspensión del/tras.: Horquilla convencional de 41 mm/Dos amortiguadores; Freno del./tras.: Un disco de 260 mm. Pinza de 4 pistones (ABS)/ Disco de 240 mm; Ruedas: 120/70-14" / 140/60-13"; Capacidad depósito: 12 litros; Distancia entre ejes: 1.550 mm; Altura asiento: 750 mm; Peso: 171 kg.