Le Mans suena a motor. Esta localidad francesa situada en los Países del Loira ha albergado durante décadas una de las pruebas automovilísticas más importantes de la historia de la automoción: las 24 Horas de Le Mans. De ahí que el circuito de la Sarthe se haya convertido con el paso del tiempo en un templo para los amantes tanto de los coches como de las motos.
El asfalto de Le Mans rezuma historia en cada centímetro, y ya que hablamos de curvas y lugares legendarios, no podemos dejar de nombrar zonas emblemáticas de este circuito de 13.626 metros y 38 curvas. Así, cualquier aficionado ha escuchado lugares como la curva y la chicane Dunlop, el Virage de la Chapelle, las Esses de la Foret, el Virage du Tertre Rouge, la Courbe du Hunaudières, el Virage du Mulsanne, el Virage d’Arnege, el Virage du Pont, la Chicane Maison-Blanche o la Chicane du Raccordement, entre otros.
El Circuito Le Mans Bugatti
A mediados de los años 60 del pasado siglo se acometió la construcción de un circuito de menor tamaño en el que se pudieran celebrar otro tipo de competiciones. Y así nació Le Mans Bugatti, un trazado menor que ocupa una pequeña parte del original de La Sarthe.
Como los aficionados saben, es en este en el que se celebra el Gran Premio de Francia en el Campeonato del Mundo de Motociclismo. No se caracteriza por tener curvas con una gran dificultad, aunque sí que es muy propicio para adelantar y que en su pista se vean buenas carreras. Además, cuando llueve puede convertirse en una auténtica lotería, dando lugar a carreras espectaculares.

Su longitud es de 4.185 metros y cuenta con once curvas (se pueden sumar más si alguna de ellas se contabiliza como dos).
Las curvas del Circuito Le Mans Bugatti son las siguientes:
1. Curva Dunlop. Tanto esta primera curva como la chicane que viene a continuación pertenecen también al circuito grande, siendo, por lo tanto, una de las zonas más emblemáticas. La primera curva es abierta a derechas.
2 y 3. Chicane Dunlop. Las dos curvas siguientes forman esta chicane que primero gira a izquierda y después a derecha.
4. La Chapelle. En esta curva cerrada a la derecha se abandona el circuito de La Sarthe para adentrarse en la pista que solo pertenece al Bugatti.
5. Le Musée. Después de la horquilla de La Chapelle sigue una pequeña recta que lleva a otra horquilla a izquierdas, llamada del Museo.
6. Garage Vert. Al igual que la anterior, esta curva a derechas (pueden sumarse dos) llega después de una pequeña recta en la que se alcanza mucha velocidad y donde hay que reducir más de 160 km/h en un breve espacio de tiempo y espacio.
7 y 8. Chemin au Boeufs. Estas dos curvas entrelazadas se sitúan al final de una recta y dan lugar a otra. Son bastante rápidas y para muchos es la parte más complicada del circuito, ya que hay que realizarlas a una velocidad elevada.
9 y 10. La "S" du Garage Bleu. Como su nombre indica, estas dos curvas forman una “S” en la que los pilotos pueden intentar el adelantamiento. Lo cierto es que con tantas frenadas tras pequeñas rectas, se trata de una pista propicia para intentar rebasar a los oponentes. La “S” primero gira a la derecha y después a la izquierda.
11. Raccordement. La última curva del trazado es a derechas y podría considerarse como dos muy seguidas que forman una especie de horquilla. El Raccordement forma enlaza con el circuito de la Sarthe y con la línea de meta.