Un país como Venezuela puede sentirse orgulloso de contar entre sus deportistas con algún que otro nombre más que destacado en lo que al motociclismo se refiere. Es el caso del piloto Carlos Lavado Jones, nacido en Caracas en el año 1956 y que puede presumir de tener en su palmarés profesional dos títulos mundiales en la categoría de 250 cc. Este piloto es, junto con su compatriota, Johnny Cecotto los dos únicos venezolanos que han logrado ser campeones mundiales de motociclismo de velocidad.

Sus inicios
Volviendo a Carlos Lavado, su debut como parte del mundial de velocidad fue en el año 1978 participando en el Gran Premio de Venezuela; en su caso en la categoría de 250 centímetros cúbicos que con el tiempo se vio que dominaba. Fue tal su actuación durante esa carrera que logró alzarse con la segunda posición. Ese mismo año participaría en tres pruebas más aunque sin lograr unos resultados tan destacado.
En la temporada siguiente participó en la categoría de 350 cc ganando de nuevo fue en el Gran Premio de Venezuela. Estos dos hitos no hacían sino presagiar lo que estaba por venir en cuanto a los mejores años de Carlos Lavado a lomos de las dos ruedas. Así pues, sus grandes temporadas fueron las de 1983 y 1986 ya que se llevó a casa el título de campeón del mundo en la cilindrada de 250 cc. Era el colofón a una carrera profesional de 15 temporadas en el mundial de velocidad (desde el año 1978 hasta 1992), en las que este piloto venezolano consiguió tomar parte en 137 carreras, 125 de ellas en la categoría de 250 cc, lo que le permitió pisar el podio en más de 40 ocasiones.
Una experiencia que después ha sabido aprovechar, tras su retirada del mundo de la alta competición, en su trabajo como asesor de pilotos venezolanos de motociclismo como Robertino Pietri y Gabriel Ramos.
Venezonalos con nombre propio
Carlos Lavado es toda una leyenda en su país como también lo es su compañero Johnny Cecotto que fue dos veces campeón mundial de motociclismo, además de cosechar otros tantos éxitos en Fórmula 1. Y es que este es de los pocos pilotos que han competido en los dos certámenes más prestigiosos del motociclismo y el automovilismo.
Entre los momentos más memorables de Cecotto durante su andadura profesional destaca su participación en el año 1975 en las 200 millas de Daytona, con una Yamaha, donde pese a salir el último en la parrilla llegó a ser tercero en la clasificación, por delante incluso de todo un campeón de entonces como era Giacomo Agostini que acabó cuarto.
En el caso de su participación en las cuatro ruedas, su debut en esta modalidad fue de la mano del equipo Minardi en el Campeonato Europeo de Fórmula Dos de 1980. Tras ganar tres carreras en la temporada 1982, dio el paso a la Fórmula 1 en el año 1983 donde compitió en más de una veintena de grandes premios.