Cuenta una leyenda reciente que en el Puerto de la Cruz Verde en ocasiones se aparece una dama que en realidad es el espectro de una mujer muerta por un accidente de tráfico. Hay conductores que aseguran haberla visto haciendo autostop.
Quizás algunos motoristas también se han topado con la Dama de la Cruz Verde, y no sería de extrañar, puesto que es uno de los lugares moteros por excelencia. Allí se reúnen decenas de moteros (generalmente de la Comunidad de Madrid y aledaños), especialmente los fines de semana, ya que las carreteras de la zona invitan a disfrutar sobre las dos ruedas como pocos sitios lo hacen.
Desde los 70
La tradición motera de este puerto surgió en los años 70, cuando se celebraron cerca de San Lorenzo de El Escorial los Seis Días de Todo Terreno. Los amantes de las dos ruedas quedaron prendados por la zona y convirtieron al bar-restaurante que se encuentra en la cima a 1.256 metros de altitud en su centro de operaciones.
De hecho, es raro circular por la zona y no encontrarse numerosas motos aparcadas en la puerta. Y es que aquel es un buen lugar para quedar y compartir sensaciones con otros motoristas. Además, desde ese aparcamiento es posible tomar diferentes rutas que resultan muy atractivas para los conductores.
¿Dónde está exactamente el puerto de la Cruz Verde?
El alto de la Cruz Verde se halla en la carretera que va de San Lorenzo de El Escorial a Robledo de Chavela, aunque desde la rotonda que hay en la cima, también es posible dirigirse a otros destinos, como es el caso de Ávila, por una carretera de las que se disfrutan gracias a sus curvas y a que ofrece todo tipo de divertimentos sobre la moto.
De igual modo, el camino a Robledo de Chavela es uno de los favoritos de quienes allí se dan cita, así como la bajada (o subida) que hay con El Escorial. Eso sí, en este caso las curvas son muy lentas y puede que terminen siendo muy pesadas para quienes prefieran rodar a una mayor velocidad.

Ventajas y desventajas
Como en todo, suele haber ventajas y desventajas en acudir a la Cruz Verde. Entre las primeras están las siguientes:
- Cualquiera de las carreteras que llevan hasta allí tienen alicientes para los moteros.
- Está cerca de núcleos urbanos de Madrid.
- Se juntan numerosos moteros que tienen gustos similares. Allí es complicado aburrirse, ya que siempre hay alguien con quien conversar sobre motos.
- La carretera no se encuentra en malas condiciones.
Por otro lado, las desventajas que se pueden apuntar son las siguientes:
- La primera de todas es que tiene una gran afluencia tanto de motos como de coches, con lo que en muchas ocasiones hay tanto tráfico que termina siendo un engorro para el motorista que busca mejores sensaciones.
- La subida desde El Escorial es revirada y casi no se puede adelantar, con lo que las motos deberán amoldar su paso al de los autos.
Como apunte final, el hecho de que esté tan frecuentado ha obligado a las fuerzas de seguridad que lo vigilen con ahínco.