La Rabassada, la carretera más emocionante y peligrosa de Barcelona

Este tramo que lleva hasta San Cugat del Vallés es muy célebre entre los moteros catalanes.

Carretera de La Rabassada en Collserola. Fuente: iStock/luzimag
Carretera de La Rabassada en Collserola. Fuente: iStock/luzimag

En el motociclismo español hay dos certezas muy claras: la primera es que Barcelona es una de las ciudades donde más amantes por las motos hay y la segunda es que todos ellos conocen la carretera de la Rabassada o de la Arrabassada.

Esta vía realmente es la BP-1417 y es la encargada de enlazar la Ciudad Condal con San Cugat del Vallés al tiempo que atraviesa el coll de l’Erola en la sierra de Collserola. Y es muy conocida no solo porque suma numerosas historias y anécdotas, sino también porque es una de las favoritas de los moteros catalanes.

Las curvas de La Rabassada

Se trata de un trayecto de unos 11 kilómetros donde se suceden curvas de todo tipo que resultan perfectas para disfrutar sobre la motocicleta, ya que ponen a prueba a los conductores que quieren sacar todo el partido de sus máquinas a la vez que disfrutan de unas vistas espectaculares de Barcelona.

De hecho, no es extraño encontrarse motoristas subiendo o bajando en cualquier momento del día. Incluso los hay que se juntan en grupo para realizar el trayecto, tratando de emular las carreras que se empezaron a disputar en los años 20 del siglo pasado.

Carretera de La Rabassada. Fuente: iStock/GMS03
Carretera de La Rabassada. Fuente: iStock/GMS03.

Un trayecto peligroso

Claro que los tiempos han cambiado y en la actualidad hay que tener en cuenta que solo es una carretera convencional más en la que se deben respetar las normas de circulación. Y más si como la Rabassada es una vía por la que transita mucho tráfico de todo tipo (de hecho, al parque de atracciones del Tibidabo se accede por ella).

No en vano, además de por ser una de las zonas favoritas de los motoristas barceloneses, es conocida por el alto índice de siniestralidad que tiene, ya que en su asfalto han perdido la vida muchas personas. Y lo peor de todo es que esta tendencia se mantiene si nos atenemos al informe EuroRAP que elaboró el RACC en colaboración con el Servei Català de Trànsit. Según este documento, en el trienio que va de 2017 a 2019, la BP-1417 fue la carretera catalana en la que era más probable tener un accidente grave o muy grave.

Este hecho afecta especialmente a la comunidad motera ya que en el 80 % de los siniestros importantes que se produjeron en la Rabassada había presencia de motoristas, quienes están más expuestos a los peligros que los conductores de automóviles.

Por lo tanto, a pesar del atractivo que supone recorrer sus curvas llevando al límite la pericia personal y la capacidad para manejar la moto, hay que tener presente en todo momento que no se está circulando por un circuito cerrado y que se trata de una zona en la que suele haber mucho tráfico. Solo así se evitarán posibles accidentes fatales.

Pasado motorista

Como hemos apuntado, la Rabassada es uno de esos trayectos que han pasado a la historia del motociclismo en nuestro país porque en 1922 comenzó a disputarse la subida de la cuesta tanto para motos como para coches. Allí se disputaron la victoria grandes pilotos que buscaban ganar segundos en cada una de las curvas que componen una carretera que se convirtió en mítica pero a la que, a día de hoy, le cuesta quitarse el sambenito de zona peligrosa.

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