Por lo general, tomar la decisión de comprar una moto para restaurar es algo que solo hacen aquellos que sienten de verdad amor por las motos y que han convertido la mecánica en su hobby. Por ello, para restaurar una moto se necesita encontrar estrategias para llevar a cabo el proceso.
Además, la ventaja de iniciar un proyecto de restauración de moto es que tienes la oportunidad de personalizarla de acuerdo a tus gustos y hay quienes lo hacen sin importar si las modificaciones significan una mayor inversión. En este artículo, te ofrecemos valiosos consejos que te ayudarán a elegir la moto adecuada y cómo trabajar en su restauración.
La compra de motos para restaurar: Aspectos clave a considerar
Si te dispones a buscar una moto vintage para restaurar, es importante prestar atención a ciertos factores que definirán el éxito del proceso de restauración, entre los cuales, te advertimos sobre los siguientes:
- Verifica el número de bastidor y comprueba que coincida con el número de matrícula.
- Tramita ante una oficina de la Dirección General de Tráfico un informe de vehículo para asegurarte de la autenticidad de la moto que planeas comprar.
- Cuando obtengas el informe, asegúrate de cuántas transferencias de propiedad previas a la tuya ha tenido la moto, su modelo exacto, la cilindrada, etc. El informe también lo puedes tramitar a través de internet, si dispones de certificado digital o DNI electrónico.
Consejos para restaurar una moto
Una vez que hayas adquirido la moto a restaurar y hayas revisado los detalles que antes indicamos, sigue los pasos que a continuación describimos:
Mantenimiento y reparaciones
- Es momento de hacer un examen detallado de la moto. Identifica si está completa o si, por el contrario, le faltan piezas importantes.
- El funcionamiento del motor es muy importante, por eso, recomendamos que lo revises con mayor atención.
- Revisa si la bujía produce chispa, de no ser así significa que debes resolver problemas técnicos.
- Antes de iniciar la restauración, lava de forma minuciosa las piezas de la moto para comprobar el estado de cada una.
- Como recomendación, antes de desmontar cualquier pieza, hazle una foto para luego saber cómo volver a montarla.
Desmontaje y selección de piezas
El desmontaje es la primera etapa en el proceso de restauración. Debes identificar qué piezas se encuentran en buen estado y organizarlas por grupos, para ver cuáles deben ser reparadas o reemplazadas.
Haz un listado de talleres o tiendas especializadas y desguaces para saber dónde ir a por las piezas que necesitas cambiar.
Por otro lado, el lavado, pulido y decapado pueden ser realizados por ti, sin embargo, para otros procesos más complejos, como para cromar algunas piezas de la moto, deberás acudir al apoyo de un profesional.
Revisión mecánica y montaje final
Para acabar de volver a montar la moto debes examinar la mecánica de la moto, como el motor, las luces y frenos, y de ser necesario, repararlo tú o un experto.
- Cuando las piezas estén reparadas o restauradas, es momento de montarlas de nuevo, con cuidado.
- Si no recuerdas el proceso de desmontaje, utiliza las fotos como guía.
- Una vez que las piezas se encuentren en su lugar y se complete la restauración, debes registrar el vehículo rehabilitado ante la DGT.
- La Inspección Técnica (ITV) solo procede después de haber registrado la moto ante la DGT.
- Por último, no olvides gestionar el seguro que mejor se adecúe a tu moto restaurada.
La restauración de motos es una actividad que permite revivir la esencia de las clásicas de tiempos atrás. Siguiendo los consejos y trucos proporcionados podrás adelantar un proceso exitoso de tu moto.