En las primeras temporadas de MotoGP, después de haber abandonado las motos de 500 cc, aparecieron algunos equipos que estaban dispuestos a plantar cara a las grandes marcas. Es decir, buscaban hacerse ver entre las Honda, las Yamaha y las nuevas Ducati. Sin embargo, casi todas ellas lo tuvieron realmente complicado para mostrarse competitivas. Claro que los intentos fueron encomiables si se tiene en cuenta que luchar contra los grandes gigantes de las dos ruedas es una tarea harto complicada hoy en día… y más en MotoGP. Pues bien, uno de esos equipos fue Blata WCM, un proyecto que buscaba obtener grandes resultados en un plazo de cinco años pero que quedó en agua de borrajas.
Origen del equipo Blata en MotoGP
Todo comenzó en el año 2004, cuando la marca Blata, originaria de República Checa y especializada en la fabricación de mini motos decidió que participaría en el Campeonato del Mundo de Motociclismo en la cilindrada mayor, es decir, directamente en MotoGP. Esto fue posible porque la compañía creada por Pavel Blata llegó a un acuerdo con el equipo WCM (Harris WCM) que ya estaba disputando el mundial. El objetivo no era otro que desarrollar una moto con motor en V6 que permitiera a los pilotos luchar en los puestos de cabeza a medio plazo. De ese modo, Blata no solo sería conocida por la mini bikes, donde ya participaba en el campeonato, sino que entraría en el mercado por la puerta grande.
“Asociarse con WCM y entrar en el Campeonato del Mundo de MotoGP significa una oportunidad de llevar el nombre de Blata a todo el mundo y constituye un proyecto tecnológicamente excitante”, explicó en su día el propio Pavel Blata, a lo que añadió: “Estamos muy orgullosos de hacer este motor V6 MotoGP y de llevar a buen puerto el proyecto; tendremos que superar diferentes obstáculos pero es algo muy importante para nuestra producción”.

Por su parte, Peter Clifford, director del equipo WCM, aseguró que querían “construir un nuevo motor basado en la cuatro-cilindros que estamos usando en este momento, pero con 6 cilindros. Obviamente necesitábamos un socio para apoyar este proyecto ya que nuestras finanzas y nuestra capacidad tecnológica son limitadas. En una reunión con Pavel Blata ya quedó claro que pensábamos de modo parecido y que abordábamos la competición de una manera similar. En cierto modo, le cogí un poco del brazo para poner en marcha el proyecto pronto. Y él aceptó el desafío, lo cual es perfecto para todos”.
Los resultados de Blata en MotoGP
La aventura conjunta solo duró un año, en el que no se llegó a construir la moto de seis cilindros, de manera que el equipo Blata compitió durante toda la temporada con la que WCM tenía el año anterior. Los pilotos elegidos para la empresa fueron el italiano Franco Battaini y el británico James Ellison, que debían forjar los primeros pilares de un proyecto que debía durar cinco años. El mejor resultado lo obtuvo Battaini en Japón, con una undécima posición.