A comienzos del pasado siglo nacía el piloto británico Leslie Graham, quien tuvo una carrera deportiva donde se subió a 19 podios, disputó más de medio centenar de carreras, se llevó 8 victorias y 7 vueltas rápidas desde su debut como profesional. Pero, sin duda, este piloto será recordado en la historia del motociclismo como el primer campeón del mundo de la historia de la categoría 500 centímetros cúbicos; algo que logró en el año 1949.

Su gran logro
La conocida ciudad de Liverpool presenció cómo un joven Leslie Graham daba sus primeros pasos encima de una moto. Así, en el año 1936 se compró una moto modelo OHC casi nueva de 250 cc y la reconstruyó para participar en el Gran Premio del Ulster de 1936. Un año más tarde corrió en la North West 200 de Irlanda del Norte y tras esta carrera llegó su primera victoria en Donington Park, así como su honroso cuarto puesto en el Gran Premio del Ulster.
En pleno ascenso en su carrera llegó la Segunda Guerra Mundial y Leslie Graham sirvió como piloto de combate; donde incluso llegó al rango de teniente y fue galardonado con la Cruz de Vuelo Distinguido en diciembre de 1944. Terminada la contienda bélica regresó a las pistas de velocidad y empezó como piloto privado en la carrera de Cadwell Park con una Norton 350 gracias a la cual ganó.
No habría que esperar mucho para que llegara el título por el que el inglés siempre será recordado: fue el primer campeón mundial de la historia de la categoría de 500 cc en 1949 y subido a lomos de una motocicleta modelo AJS Porcupine. Por si fuera poco, ese mismo año se hizo también con dos victorias: el Gran Premio de Suiza y el Gran Premio del Ulster.
Una carrera intensa
Lejos de conformarse con ser el mejor del mundo en la categoría reina en ese momento, la carrera de Leslie Graham sigue con toda la humildad y tesón demostrado hacia entonces. Así, un año más tarde, en la temporada de 1950 el piloto británico acabó tercero en la general por detrás de Umberto Masetti, que corría con Gilera, así como de la que entonces era considerada una estrella emergente en el mundo de la velocidad: Geoff Duke. También probó suerte en los Seis Días Internacionales de Enduro celebrados en Gales subido a una AJS 350.
Al año siguiente, en 1951, volvió a participar en el Mundial gracias a que el conde Domenico Agusta le propuso pilotar una motocicleta MV Agusta. Algo que aceptó sin pensarlo demasiado ya que venía de estar algo frustrado y desanimado por el bajo rendimiento demostrado por su AJS anterior. Así, desde ese momento sería el equipo italiano el encargado de desarrollar sus motos de 500 centímetros cúbicos de cuatro cilindros.
Pese a lo que podía parecer en un primer momento, Leslie Graham no tuvo mucha suerte tampoco en este caso con su MV. Y eso que era una motocicleta potente, pero no llegó a cogerle el truco a la hora de pilotar. Ese año solo se pudo llevar a casa el Gran Premio de Suiza con una Velocette MkVIII KTT 350.
De nuevo regresó, en 1952, a la categoría reina de la mano de MV Agusta y en este caso sí pudo llevarse el segundo puesto. Fue, por tanto, subcampeón del mundo por detrás del italiano Umberto Masetti y con dos victorias parciales. Una buena estrella que le persiguió incluso en los 250 cc cuando se hizo con un aplaudido tercer puesto por detrás Enrico Lorenzetti y Fergus Anderson.
Todavía quedaba alguna que otra victoria más para Leslie Graham; sobre todo en su estreno en la temporada de 1953 en el TT Isla de Man donde conseguiría su primera victoria en esta carrera en la categoría de Lightweight 125 cc para MV.
Su repentina muerte
Pero esa escena no pudo repetirse. Cuando estaba teniendo lugar la carrera senior, el inglés pierde de repente el control de su moto a una gran velocidad y muere a consecuencia del fatal accidente. Carlo Bandirola y el resto del equipo de carreras MV se retiraron del campeonato ese año como señal de respeto y duelo por el fallecimiento de Leslie Graham. Una muestra de solidaridad que se unió a la construcción del Graham Memorial en 1955.