Si preguntamos a cualquier aficionado español sobre quién fue su piloto favorito en la segunda mitad de los años 90 y la primera década del nuevo siglo, muchos de ellos contestarán que Carlos Checa. Y no es de extrañar, ya que el número 7 derrochaba carisma y calidad en cada carrera. No importa que no obtuviera grandísimos resultados, porque la pasión que mostraba sobre la moto era difícil de igualar. Afortunadamente, el destino le llevó a ganar el mundial de Superbike después de pasar media vida batiéndose el cobre en el Campeonato del Mundo de Motociclismo.
Marcas de Carlos Checa
En cuanto a las marcas con las que desarrolló su carrera, no fueron demasiadas, ya que la mayor parte de su trayectoria la pasó en los 500 cc.
- Honda. Su debut se produjo en 1993 en los 125 cc, sobre una Honda y en el Circuito de Montmeló, en un GP que logró terminar en séptimo lugar. Esa misma temporada Checa participó con la marca del ala dorada en los 250 cc. Hasta 1998 solo participó en el mundial con este fabricante, especialmente en el medio litro, territorio donde estuvo gran parte de su carrera, además de en MotoGP. Cabe señalar que por aquel entonces los españoles no destacaban en la cilindrada reina. De hecho, solo Crivillé había sido capaz de ganar un GP. Checa también lo logró en 1996. Ya en la primera carrera del año en Malasia demostró su calidad con su primer podio. La victoria llegó en Montmeló, donde superó a Doohan y Crivillé. Su mejor año con Honda lo tuvo en la temporada en que dejó de competir con sus motos. Fue en 1998, acabó cuarto en el mundial con una nueva victoria conseguida en el Circuito del Jarama. Esta fue la segunda y última vez que subió a lo más alto del podio. Posteriormente en 2007 volvió a disputar el mundial con una Honda satélite, pero no obtuvo resultados reseñables.
- Yamaha. En 1999 fichó por Yamaha (su Yamaha roja con el 7 se convirtió en una de las favoritas para los españoles), pero nunca logró vencer un GP con la marca de los tres diapasones. Siempre batallador, se subió unas cuantas veces al podio, pero no a lo más alto. A pesar de todo, Carlos Checa se mostró muy competitivo tanto en los últimos años de los 500 cc como en los primeros de MotoGP.

- Ducati. La italiana fue la tercera marca con la que disputó Grandes Premios el piloto catalán. Visitó dos veces el podio y comenzó una relación con los de Borgo Panigale que se extendería hasta el Campeonato Mundial de Superbike. En él logró el título en una temporada 2011 que fue inolvidable para el 7. En su trayectoria en SBK con Ducati obtuvo 22 victorias, que se unen a las dos que consiguió con Honda en las primeras temporadas en las que probó con las motos de serie.